Las reacciones políticas al plan policial para blindar la Praza das Mercedes y así erradicar el botellón no se han hecho esperar. El PP cree que se trata de un alivio temporal e insta al alcalde a convocar a partidos y agentes sociales en busca de soluciones.
Apenas tres días han tardado los políticos, en este caso la oposición del Concello de Ourense, para valorar la decisión de la Policía Local de blindar la Praza das Mercedes el fin de semana para erradicar el botellón. La medida, que se prolongará durante varios fines de semana, es coyuntural y poco efectiva, a juicio del viceportavoz del grupo municipal del PP, José Araújo, ya que -según añade- la solución pasa por un acuerdo social en el que tengan un papel destacado los jóvenes y en el que se conjugue tanto la prevención del consumo de alcohol como los derechos de los vecinos.
El PP propone al alcalde que convoque a todos los grupos con representantes en el Concello, así como a los agentes sociales para abordar esta cuestión de una manera dialogada. Sólo sí -agrega Araújo- se conseguirá una solución integral y que debe pasar por ofrecer alternativas a los jóvenes en su tiempo de ocio.
Xuventudes Socialistas
También la propuesta de destinar una discoteca las noches de los jueves para realizar el botellón ha tenido contestación en las Xuventudes Socialistas. Esta agrupación considera que esa iniciativa pudiera institucionalizar varios tipos de ocio nocturno: Un deles elitista e outro propio de patio carcelario, pechado e arrinconado. Esta facción juvenil del PSOE es partidaria de un botellón más responsable -al que denominan botellón cívico-, limitando el ruido y apelando a la recogida de los residuos que genere e incluso apelando a un moderada ingesta de alcohol. Esto debería, según dicen, ir acompañado de un programa de voluntariado para promover hábitos de vida saludables y respeto hacia el mobiliario público.
El PP propone al alcalde que convoque a todos los grupos con representantes en el Concello, así como a los agentes sociales para abordar esta cuestión de una manera dialogada. Sólo sí -agrega Araújo- se conseguirá una solución integral y que debe pasar por ofrecer alternativas a los jóvenes en su tiempo de ocio.
Xuventudes Socialistas
También la propuesta de destinar una discoteca las noches de los jueves para realizar el botellón ha tenido contestación en las Xuventudes Socialistas. Esta agrupación considera que esa iniciativa pudiera institucionalizar varios tipos de ocio nocturno: Un deles elitista e outro propio de patio carcelario, pechado e arrinconado. Esta facción juvenil del PSOE es partidaria de un botellón más responsable -al que denominan botellón cívico-, limitando el ruido y apelando a la recogida de los residuos que genere e incluso apelando a un moderada ingesta de alcohol. Esto debería, según dicen, ir acompañado de un programa de voluntariado para promover hábitos de vida saludables y respeto hacia el mobiliario público.
