Un premio para homenajear a la “medicina montada”

La vida de los médicos rurales gallegos no era para nada lujosa en el pasado siglo. Jornadas interminables a lomos de sus caballos, alumbrando el camino con un candil y visitando a sus convecinos que necesitaban su ayuda en el momento que la salud faltaba. Esto les hizo ganarse el nombre de “medicina montada” más allá del Bierzo. El Museo del Médico Rural de Maceda fue uno de los galardonados con el premio Rodolfo Prada, que se entregó ayer, a las 20,00 horas, en el centro cultural Marcos Valcárcel, dentro de la ICC Week. “Recibir este galardón é unha homenaxe a todos eses médicos rurais”, indica el fundador del museo, José Manuel Lage. Lage explica que el objetivo de este museo es “reflexar esa imaxe do médico rural: a cabalo, que era veciño, médico, confesor, psicólogo, amigo… que atendía na casa dos seus doentes, que estaba dispoñible as 24 horas do día e trataba a unha persoa durante todas as etapas da súa vida”. Pero, a pesar de estas condiciones -el salario era muy precario y esta vida en nada se asemejaba a los médicos urbanos- “o seu espírito vocacional e humanitario intachables, tanto que eran coñecidos como os médicos dos pobres”. El oficio de médico era realmente duro en la posguerra. Hay que recordar que la penicilina no llegó hasta los 60 y no había tantas vacunas, lo que obligaba a estos “artesáns da saúde” a tratar a sus pacientes con técnicas que ahora nos parecen muy precarias. Además, no hacían distinción entre ricos y pobres, ya que muchos no tenían ni dinero ni especie para pagar esas igualas médicas. Este sacrificio propio en aras del bien común logró que España pasase de “sobrevivir como podía” a tener una de las mejores sanidades del mundo. “Pasamos dunha esperanza de vida de 40 anos a principios de século a máis de 82 na actualidade”, subraya Lage. Acerca de dedicarse a la medicina rural, Lage, médico en Maceda durante décadas, explica que “fun moi feliz de poder exercer a medicina na miña aldea, que me permitiu realizarme tanto a nivel profesional como personalmente. Así, quero transmitir esa idea para que sirva de faro para as novas xeracións e queiran adicarse á medicina no rural”. El museo, ubicado en la planta baja del Concello de Maceda, tiene más de 2.000 utensilios históricos distribuidos en 9 salas que ayuda a comprender mejor la dificultad que entrañaba dedicarse a ser médico a principios y mediados del siglo XX. GESTIÓN CULTURAL La gestora cultural Yolanda Castaño y el Festival de Cine de Cans fueron los otros dos galardonados del evento. Castaño fue elegida por unanimidad con el primer premio, por la creación del ciclo internacional de recitales poéticos mensuales, titulado “Poetas Di (n) Versos”. “Este ciclo é o único estable que presenta poetas internacionais de maneira periódica e regular en toda España”, señala la poeta. “A creación galega máis emerxente pasa por Cans, gran plataforma para os novos creadores”, aseguraron los organizadores de este festival de cine, que obtuvo el segundo premio. Antes se celebró el ciclo de gestión cultural a cargo del profesor de Economía de la Universidad de Barcelona, Manel G. Piñero, con la charla sobre “La innovación en la gestión de la cultura”. La directora de la Fundación Contemporánea, Mariana Pineda, abordó “La cultura, por sus profesionales”.