El preso al que no le tocaba morir

Los exreclusos e internos de Pereiro que conocieron a la víctima del “crimen de la herencia” descartaron su fuga porque soñaba con saldar una condena que consideraba merecida, una casa alquilada, tutelar a su hermano y tener un perro
Fernando Iglesias Espiño (63 años) antes de ser asesinado en agosto de 2018 creía en un futuro en libertad: quería ahorrar el dinero de la herencia de su madre; liquidar los 25 años de cárcel de…
 
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