El censo para las elecciones internas en el PSdeG ha caído en la ciudad en 77 personas, en consonancia con un descenso a nivel provincial. En este caso, el duelo Villoslada contra Caballero no lleva aparejado el clásico inflado de militantes
Parece que el socialismo ourensano no se juega tanto en estas primarias como en las pasadas federales. O, al menos, es lo que el número de afiliados atestigua. El ya clásico "inflado de censo" que acompaña cada uno de estos procesos no ha estado presente en la campaña que ayer echó su cierre en Ourense. De hecho, el censo de las primarias que enfrentaron a Sánchez y Díaz estaba en la ciudad en 665 militantes, una cifra que ha caído en 77 personas en el proceso que enfrentará este domingo a Villoslada y Caballero, en el que están llamados a las urnas 588 personas.
A nivel provincial, el censo ha caído desde los 1.647 que estaban llamados a votar el pasado mes de mayo a los poco más de 1.500 de ahora. Algún analista podría achacar esta bajada a un descenso de popularidad socialista, pero no lo creen así en el seno del partido. "Antes de cualquier proceso siempre crece el censo, una situación que también ocurre cada vez que se llega al poder", señalan fuentes del socialismo ourensano. Sin embargo, en este proceso no se ha vivido una implicación similar. Eso, a pesar de que está en juego la composición de la futura ejecutiva provincial, que deberá ser elegida como muy tarde antes del mes de febrero.
Los militantes socialistas ourensanos tendrán a su disposición este domingo 22 centros de votación en la provincia. De ellos, solo cuatro estarán a jornada completa: Ourense capital, Celanova, Carballiño y Carballeda de Avia. Los restantes, de 16,00 a 20,00 horas.
Congreso provincial
Este domingo no se acaba el proceso. Las primarias del PSdeG simplemente suponen el punto de partida de una lucha que prevé alargarse en el tiempo. Las asambleas comarcales se reunirán desde el lunes al jueves para elegir delegados. "Va a ser una semana caliente", aventuran en el seno socialista.
Los delegados se empezarán a elegir apenas 24 horas después de la votación, y con un incentivo mayor que en otros procesos. ¿Por qué? En este caso, cada agrupación comarcal envía sus delegados al Congreso gallego del 28 de octubre, sin pasar por un filtro a nivel provincial. Allí se dirimirá la composición de la ejecutiva autonómica del PSdeG, un paso clave tanto para la confección de la próxima ejecutiva provincial como en las primarias que dentro de un año empezarán a aflorar para escoger los candidatos a las respectivas alcaldías. "No es lo mismo contar con el beneplácito de la ejecutiva que ir por libre", señalan fuentes socialistas.
Los actos destapan los apoyos
Todo apunta a que en Ourense, si no hay cambio de última hora, la retirada de Leiceaga tras el acuerdo con Caballero permitirá a este último gozar de una cómoda ventaja. El pachismo se volcó con "Xocas" y ahora se traslada en su mayoría hacia Caballero, por "pura supervivencia", según apuntan fuentes socialistas, aunque sufre algunas fugas de base por el camino. Del tamaño de las mismas, dependerá que haya partido o no.
Ayer se vivió el último día de demostración de fuerza de Villoslada y Caballero en la provincia. Esta vez se pudo ver quién es quién en el socialismo ourensano, y cada peón socialista que quiso acudir a alguno de los actos tuvo que dar la cara, teniendo en cuenta que se celebraron a la misma hora.
En el acto de Villoslada se pudo ver a pesos pesados de la candidatura como De Frutos o Noela Blanco, así como militantes provenientes de O Ribeiro, con el alcalde de Ribadavia a la cabeza, y socialistas del PSOE en la ciudad, con Carmen Dacosta o Vázquez Barquero como principales representantes.
En el acto de Caballero de dejaron ver los representantes de la "tercera vía", como Javier Rey, García Lozano o la exconcejala Susana Bayo; así como el senador Luis García Mañá; el presidente del Liceo, Javier Casares, y el alcalde de Petín, Miguel Bautista. También hubo caras visibles del pachismo, como cuatro exconcejales pachistas en la ciudad, o el alcalde de Amoeiro, Rafael Rodríguez.
Mientras, Villoslada se aferra a la "libertad" mostrada por la militancia en los últimos procesos. "Lo que dicen las cúpulas ya no es tan clave y los militantes se mueven solos", apuntaban ayer desde su equipo, restando importancia al apoyo de la cúpula provincial a Caballero.
