Nueva polémica alrededor de la nueva cocina del Complexo Hospitalario de Ourense (CHUO), en este caso entre un PSOE que presentará hoy miércoles una iniciativa en el Parlamento para reclamar el mantenimiento de los puestos de trabajo y criticar el modelo de elaboración de los menús con la gerencia del área sanitaria, que insiste que "nin se privatiza nin se reducen prazas".
El secretario provincial de los socialistas, Rafael Rodríguez Villarino, y la diputada Noela Blanco comparecieron ayer a la puerta del nuevo edificio de hospitalización. El líder provincial del partido criticó que estén contemplados 113 pinches "e so exerzan 96", asegurando que la intención del Sergas es reducir la plantilla hasta los 82, "un agravio comparativo con outras provincias".
Mientras, Noela Blanco apuntó que "a situación non é nova nin nos pilla por sorpresa, dado que levamos anos pelexando pola calidade do servizo", señalando la "temporalidade" como otro de los problemas y culpando a la gestión sanitaria del presidente autonómico, Alberto Núñez Feijóo. La parlamentaria criticó también la designación de Félix Rubial como gerente, "botado a patadas de Vigo polas súas falcatruadas".
Tras conocer estas manifestaciones, la gerencia del área sanitaria recuerda que se han invertido cinco millones "para lograr a mellor cociña hospitalaria do noso país", lamentando que los socialistas "queiran equiparar a liña fría á privatización ou falta de calidade, algo que roza o absurdo".
Mientras, sobre las críticas en materia de personal, el Sergas reiteró que seguirán prestando el servicio trabajadores propios y que "falar de perda de persoal referíndose a contratacións temporais é faltar á verdade".
