PSOE de Ourense, a por la siguiente batalla

El PSOE ourensano no sale de una y ya se enfrasca en otra. Los procesos internos del socialismo, que Francisco Fumega vaticinaba el domingo que depararán meses “intensos”, continúan cuando todavía no han empezado a supurar las heridas del primer envite. Este pasado domingo, la candidatura oficialista que lideraba el alcalde de Carballiño (que apoyaban las cúpulas provincial y autonómica) ganaba con el 60% de los votos a la lista crítica de Noela Blanco en la elección de delegados para el Congreso Federal. Sin embargo, esta última celebraba sus resultados, ya que consiguió su objetivo, visibilizar que existe división interna y que, al menos, un 40% de la militancia no respalda la forma de actuar de la dirección provincial. Los críticos, por tanto, se contentan con que sacaron un resultado a nivel provincial superior a sus expectativas y con que en la ciudad, pese a no ganar al “oficialismo”, algo que creían que podía suceder, tienen músculo. Desde el “aparato” provincial, por su parte, sintieron los resultados como una victoria contundente a nivel interno, porque realmente temían una derrota en la ciudad ante un sector que ligan al tradicional “paquismo”, que consiguieron salvar por un puñado de votos. Con este reparto de poderes tras la votación de delegados, empieza una nueva campaña. Ayer, Valentín González Formoso, presidente de la Diputación de A Coruña, anunciaba su intención de concurrir a las primarias gallegas como rival de Gonzalo Caballero. La cita será el 30 de octubre. Esto abre un nuevo frente interno que, previsiblemente, tendrá protagonistas similares a los de estas últimas semanas. Los oficialistas, es decir, todo lo que giraba en torno a la candidatura de Fumega, parecen apoyar de forma cerrada a Gonzalo Caballero, mientras que en la lista contraria, que lideraba Noela Blanco, se da por hecho que gran parte basculará hacia Formoso. Vuelve la división En todo caso, habrá entre un 10-15% de apoyos que puedan variar, ya que “en unas primarias gallegas, no importan tanto las baronías de los concellos, sino que hay una decisión del militante más individualizada”, dicen algunas fuentes, lo que podría decantar la balanza para uno u otro lado. Caballero, eso sí, parte como favorito en la provincia, a tenor de los resultados de este pasado fin de semana. Esta nueva batalla no solo va de escoger entre Caballero, actual secretario xeral, o Formoso, sino que vendrá acompañada de la elección, a su vez, de delegados para el Congreso de Galicia del 7 y el 8 de noviembre. Los delegados se escogerán por agrupaciones municipales y, en la ciudad, tendrán que elegirse 21. La votación sería también el 30 de octubre y, visto lo visto, todo apunta a que no habrá lista de consenso, como no la hubo para el Congreso Federal, sino que habrá una lista de delegados afines a Caballero y otros afines a Formoso. Ahí, volverá a verse abiertamente la división y la lucha fratricida en la ciudad. Como avanzamos ya en agosto, no nos vamos a aburrir.