La vivienda digna, la integridad moral, la igualdad ante la ley o el derecho a jugar son algunas de las preocupaciones que los más pequeños reflejaron en sus dibujos y escritos premiados en el 43 aniversario de la Constitución, celebrado en el Auditorio Municipal. Los escolares también ilustraron derechos fundamentales que faltan, en los que hay que invertir o sobre los que habría que poner el ojo. Pilares básicos de cualquier democracia que si no se cuidan pueden romperse o perder brillo.
En sus obras, los niños no fueron ajenos a la realidad ourensana. Fotografías tomadas por ellos mismos de personas sin hogar, de personal sanitario (reclamando una sanidad universal) o diversas escenas de trabajo ilustraron las opiniones de los estudiantes que cursan la ESO y Bachillerato. Por otra parte, los alumnos de Primaria dibujaron escuelas y balanzas igualadas con personas diversas en ellas. Los participantes, además de mostrar al público su trabajo, fueron premiados con un ejemplar de la Constitución y un viaje a Madrid para visitar el Congreso y el Senado.
Los encargados de abrir la gala fueron también jóvenes. El Quinteto de Metales y el Ensemble de Clarinetes de Celanova arrancaron con una serie de conocidas canciones que sin duda elevaron la calidad del acto: Chicago y New York, New York de Frank Sinatra, o el Libertango de Astor Piazzola fueron las piezas con las que se dio inicio al evento.
Le siguió una presentación de Power Point en la que se expusieron varias fotografías del Subdelgado del Gobierno, Emilio González, posando con diferentes colectivos o imágenes de las fuerzas de seguridad entregando mascarillas y otros elementos para prevenir el covid. Tras ello, junto al subdelegado se subieron al escenario Manuel Pardo, jefe territorial de la Xunta; Miguel Ángel Santalices, presidente del Parlamento; Rosendo Fernández, vicepresidente de la Diputación y un despistado Gonzalo Pérez Jácome, que aprovechaba cada minuto para ver su teléfono móvil.
Emilio González realizó un discurso en el que destacó el “espíritu de concordia” de la Carta Magna “para avanzar fronte a unha España mais igualitaria, social, sostible e verde”. Habló de que el 6 de diciembre es “un día importante para todos os que cremos profundamente nos dereitos fundamentais e nas liberdades recollidas” y recordó como hace ya 43 años “demostrábamos que España e os seus cidadáns temos a capacidade de erguernos e afrontar calquera reto ou adversidade”.
Según González, nada era más necesario en aquel momento que “a búsqueda de puntos de encontro para adoptar o consenso útil que nos permitise avanzar como sociedade”. Además, el Subdelegado se atrevió a lanzar una valiente afirmación: “Convertémonos nun país moderno, tolerante e con bos servizos públicos, unha democracia plena e un referente internacional”.
El artículo 45, ¿olvidado en la ciudad de Ourense?
Tanto Emilio González como algunos de los alumnos premiados recordaron el artículo 45 de la Constitución Española. El precepto indica que todos “tienen el derecho a disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona, así como el deber de conservarlo”. Quien paralelamente a este acto insistió en el artículo fueron los Amigos das Árbores. Este colectivo se juntó ayer en las orillas del Barbaña para hacer hincapié en la falta de conservación. Si bien antiguamente era un espacio atestado de especies típicas de las ribeiras, en la actualidad “foi varrido por parte da Área de Medio Ambiente do Concello de Ourense, que seica contaba ca autorización da Confederación Hidrográfica. Seleccionaron os mellores exemplares de Ailanthus altissima, que alén de ser unha árbore invasora, ten unha gran capacidade de colonización”, explicó el representante Xosé Santos. También señaló que a propósito de la tala dejaron tirado “todo o lixo que alí se encontraba, como plásticos, latas, vidros ou zapatos”.
Por otra parte, plantaron un árbol en homenaje a Marian, la mujer que cuidaba a los gatos que allí habitaban y que falleció el año pasado tras precipitarse desde el Barbaña.
