La investigación cierra sin éxito tras retirarse más de 7.000 litros de aceite
La investigación abierta por la Guardia Civil, en la que participaron técnicos de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y de la empresa Viaqua para identificar a los autores del vertido de aceite al cauce del río Barbaña, no arrojó resultados positivos. El vertido se registró durante el último fin de semana del pasado mes de mayo.
Los investigadores iniciaron las pesquisas el pasado día 28, cuando tuvieron conocimiento de la presencia del aceite en el cauce, comenzando, según pudo saber este periódico, por las empresas que almacenan y utilizan hidrocarburos en su producción, ubicadas en los polígonos industriales de San Cibrao, Barreiros y Pereiro de Aguiar. Durante este tiempo revisaron con lupa el material utilizado y el que tienen acumulado en sus depósitos . Las pesquisas se ampliaron a talleres mecánicos y empresas de transportes ubicadas en los citados espacios industriales e incluso en los municipios de Taboadela, Ourense y Paderne de Allariz. El trabajo, según fuentes de la investigación, resultó infructuoso, dado que los agentes no encontraron indicios de que el aceite vertido por una empresa a través de sus tuberías a la red general de saneamiento.
Los agentes no descartan que el aceite llegara al río tras ser vertido a través de una alcantarilla de las aguas pluviales. "Si fue así, solamente se puede dar con el autor en caso de que alguna persona lo viera", afirmaron fuentes de la investigación. En este sentido, tanto la Guardia Civil como la Confederación Hidrográfica Miño-Sil apelan a la responsabilidad ciudadana para que alerten de cualquier posible delito contra el medio natural.
El personal del organismo de cuenca y Viaqua continuaba ayer con la recogida del aceite en un tramo de más de cuatro kilómetros, entre Ponte Noalla y O Piñeiral (San Cibrao), el más afectado por el vertido. Ya llevan retirados más de 7.000 litros. Los trabajos de descontaminación fueron presupuestados en 100.000 euros.
La muerte de 17.000 peces en 2009 llega a juicio en julio
La agresión más importante que ha sufrido el río Barbaña en toda su historia, la muerte de 17.000 peces el 24 de junio de 2009, será juzgada en el Penal 2 a partir del 10 de julio. Responsables y técnicos de la depuradora de aguas residuales de San Cibrao, de donde partió el vertido altamente tóxico de metales pesados, se sentarán en el banquillo acusados de un delito contra el medio ambiente.
Los acusan la fiscal especializada, la plataforma Ríos Limpos y el abogado del Estado.
