Los hechos protagonizados por José Francisco G.C. le valieron una imputación por un delito de amenazas y otro de daños.
José Francisco G.C. fue condenado por el Juzgado de lo Penal 2 a seis meses de prisión y multa de seis meses (dos euros diarios) por el incidente violento que protagonizó en la madrugada de 25 de agosto de 2015 en un bar de la localidad de Baltar.
El inculpado, según reconoció ayer, se valió de un cóctel molotov, que elaboró con un trapo humedecido cn gasolina y una botella de cristal, para prender fuego a la sombrillas, mesas y sillas del bar María Galiña, situado en la calle Sargento Seoane. Asimismo, utilizó una carabina de aire comprimido y comenzó a disparar balines que impactaron en la persiana del bar, un foco de luz y en los vasos de las consumiciones que tomaban en el exterior el dueño y un amigo. Tanto el propietario como su acompañante tuvieron que refigiarse en el interior para no ser alcanzados.
Los hechos ocurrieron a las 02,15 horas de la madrugada cuando el establecimiento hostelero ya había echado el cerrojo. No obstante, el acusado había estado a las 01.30 horas ya en el bar, en donde alteró el orden para a continuación abandonar el lugar.
Los hechos protagonizados por José Francisco G.C. le valieron una imputación por un delito de amenazas y otro de daños.
Los destrozos en el bar como consecuencia de los disparos con la carabina de aire comprimido y el incendio provocado con la botella de gasolina provocaron desperfectos valorados en 1.387 euros, un dinero que abonó la compañía de seguros y que el inculpado debe abonarle ahora.
