Los niños aportarán un libro a la "andaina" del sábado y se llevarán otro
Fomentar la lectura infantil. Con este objetivo, La Región organiza este sábado, 23 de abril, una actividad para que los más pequeños se sumen a la celebración del Día del Libro. La iniciativa, que está enmarcada en el programa Ourense+D, consistirá en una "andaina" por el paseo del Río Barbaña, en la que podrán participar niños y padres.
El Ourense+BookCrossing partirá a las 17,00 horas del Parque Barbaña, discurriendo el recorrido por el paseo fluvial del río hasta el Pazo dos Deportes Paco Paz, en donde los participantes tendrán bebidas a su disposición para reponer energías y volver por la misma ruta hasta el punto de partida.
La esencia de esta actividad es que cada niño participante acuda con un libro infantil, cumpliendo dos únicas condiciones: que esté usado y en buen estado. La entrega tendrá una recompensa: todos los niños que presenten el libro al inicio de la caminata tendrán el derecho de llevarse, al final, una bolsa-regalo que incluirá el libro que haya entregado previamente otro niño.
Para poder participar en la iniciativa, simplemente será necesario presentar a la organización, el propio día, los tres cupones que se publicarán en La Región -desde hoy hasta el sábado-. En el último tendrá que ser cumplimentado con los datos del tutor del menor participante, así como la edad y el colegio en el que está matriculado el menor.
Además del obsequio repartido a todos los participantes, La Región premiará con un detalle al centro educativo que más niños aporte a la actividad. Asimismo, se sortearán dos lotes de 10 libros infantiles entre todos los asistentes que se fotografíen con su nuevo libro y compartan la fotografía en las redes sociales.
Para garantizar que el reparto de los libros según la edad de los lectores es el más adecuado, se establecerán dos categorías: de tres a seis años, por un lado, y de siete a doce, por otro.
La Región se suma así al movimiento mundial del BookCrossing, entendido como la práctica de dejar libros en lugares públicos para que los recojan otros lectores, que después harán lo mismo. La idea es liberar libros "en la jungla" para que sean encontrados por otras personas.
