El fin de semana deja un reguero de gente satisfecha con la calidad y presentación de la muestra
Casi 500 personas visitaron en dos días la muestra "In Tempore Sueborum" que se inauguró el pasado viernes y que recorre la historia de los suevos en tres espacios expositivos de la ciudad de Ourense: el Centro Cultural Marcos Valcárcel, la Iglesia de Santa María Nai y el Museo Municipal.
Esta exposición única en España, en la que se recoge la historia de los suevos a través de sus vestimentas, complementos y todo tipo de herramientas empleadas por el primer reino de Europa, es de acceso totalmente gratuito, aunque a cada visitante se le entrega una entrada numerada para llevar a cabo una "contabilización perfecta", y que no bailen las cifras, según explicaban ayer desde la organización.
El sábado se registró un total de 338 visitantes (111 por la mañana y 227 por la tarde), mientras que ayer se registraron en una sesión única matutina 144 personas, lo que hace un total de 482. "É un regueiro seguido de xente entrando durante todo a mañá", comentaba ayer satisfecho uno de los encargados de guiar a los visitantes por las instalaciones del Marcos Valcárcel.
Durante este fin de semana ya se ha empezado a notar la fuerte influencia de una muestra tan especial, a la vista de la procedencia de los visitantes. El sábado asistieron tres grupos grandes llegados de Valladolid, Ávila y Badajoz, y también de muchos puntos de Galicia.
Ayer llegaron 44 participantes de las XVII Xornadas Mindonienses de Arqueoloxía, entre los que había arqueólogos, estudiantes, y público general, que se mostraron muy agradecidos por la visita guiada. Estas se pueden realizar a las 18,30 horas todos los días, aunque para grupos hay que contactar previamente en el teléfono 988 317 895. "Es una exposición muy buena y la mayor parte del grupo se ve con ganas de volver para enseñárselo a otros. El boca a boca será fundamental", dijo Abel Vigo, el director de las jornadas. "Desde un punto de vista arqueológico, la muestra es aprovechable y atractiva. Es precioso poder ver esta riqueza reunida en una sola ciudad", añadió.
El caldero de Musov, los anillos, broches de cinturones, las primeras monedas, estelas funerarias o la reconstrucción de las edificaciones suevas, entre lo más exitoso.
