El Concello afirma que la concesión de la licencia sólo depende de la empresa concesionaria
La residencia universitaria parece que cada vez está más cerca de ser, por fin, una realidad. La concesión de la licencia de apertura, gestionada por Siresa Campus SA, ya sólo depende de la entrega de la documentación requerida por el servicio de Urbanismo del Concello, quien ya notificó el pasado 11 de abril a la empresa el expediente de legalización del edificio, pendiente de urbanización completa.
Parte de la situación de este edificio se remonta al año 2013, cuando el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia dejó sin efecto las licencias de apertura y ocupación, al encontrarse en ámbito de suelo urbano no consolidado. Así que el Concello se vio en la obligación de precintar o edificio. El grupo de gobierno se reunió con las partes implicadas para buscar una solución al conflicto. Según explica el Concello, "logo de que a xunta de compensación da zona afectada lle ofrecese o terreno ao Concello para a súa recepción, informes técnicos e xurídicos dos funcionarios municipais seguen agardando pola documentación necesaria para normalizar dita recepción".
El pasado 22 de marzo 2016, la empresa presentó en el registro parte de la documentación requerida, salvo el proyecto de legalización, requisito indispensable para la licencia.
