El delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez, confirmó ayer que todos los indicios apuntan a que ha sido Resistencia Galega el grupo autor de la explosión que causó grandes desperfectos en la Casa Consistorial de Beade durante la madrugada del lunes. Asimismo, matizó que pese a no estar la investigación cerrada, el explosivo utilizado ha sido pólvora prensada dentro de una olla a presión; 'como lo que han utilizado en otras ocasiones', puntualizó.
En un comunicado público, precisó que se le atribuyen los hechos a Resistencia Galega, 'salvo sorpresas inesperadas', teniendo en cuenta que 'se trata de un explosivo del mismo tipo utilizado por este grupo en otras ocasiones y de un modus operandi similar: colocado a la puerta del establecimiento y de madrugada'. Juárez también recordó que Resistencia Galega 'no acostumbra a reivindicar sus acciones por eso, con algunas reservas, se le atribuye la autoría'.
Mientras la Policía Judicial continúa las investigaciones encaminadas a descubrir más detalles sobre lo sucedido para identificar a los autores, en Beade se iniciaban las obras de reconstrucción del Consistorio, de donde se desplomaron paredes, techos y carpintería, al mismo tiempo que resultó dañado en gran medida el material y equipos de trabajo, además de la puerta principal, arrancada de cuajo por la explosión.
Los obreros iniciaron ayer los trabajos, después de tapiar el edificio y colocar precintos para evitar la entrada de intrusos. Los daños todavía no han sido valorados, aunque el mismo alcalde de Beade, Senén Pousa, confirmaba que son cuantiosos. Ayer el regidor no quiso hacer declaraciones, si bien, apuntó que 'polo momento non sabemos nada nin ninguén reivindicou os feitos'. Eso sí, declaró que en 2015 volverá a presentarse a las elecciones municipales 'e voltarei ter maioría absoluta'.
De tres a seis meses se calcula que durarán la obras de reparación, por cuyo motivo, ayer también se procedía a trasladar lo poco que se ha salvado del material de oficina hasta el nuevo edificio de la Mancomunidade do Ribeiro, ubicado en el mismo municipio. Allí dispondrán de dos dependencias para atender a los vecinos, que deberán desplazarse 500 metros para realizar sus gestiones.
La explosión también ha dejado ya un conflicto político en la misma localidad: el portavoz socialista, Miguel Ángel Carreiro, presentó una denuncia en el Juzgado de Ribadavia contra el alcalde, su hermana, Mara Pousa, y su nieta (segunda teniente alcalde), Susana Fernández, 'por insultos'. 'Chamáronme instigador e sinaláronme co dedo, dicindo que uns poñen a diana e outros disparan'.
Mientras la Policía Judicial continúa las investigaciones encaminadas a descubrir más detalles sobre lo sucedido para identificar a los autores, en Beade se iniciaban las obras de reconstrucción del Consistorio, de donde se desplomaron paredes, techos y carpintería, al mismo tiempo que resultó dañado en gran medida el material y equipos de trabajo, además de la puerta principal, arrancada de cuajo por la explosión.
Los obreros iniciaron ayer los trabajos, después de tapiar el edificio y colocar precintos para evitar la entrada de intrusos. Los daños todavía no han sido valorados, aunque el mismo alcalde de Beade, Senén Pousa, confirmaba que son cuantiosos. Ayer el regidor no quiso hacer declaraciones, si bien, apuntó que 'polo momento non sabemos nada nin ninguén reivindicou os feitos'. Eso sí, declaró que en 2015 volverá a presentarse a las elecciones municipales 'e voltarei ter maioría absoluta'.
De tres a seis meses se calcula que durarán la obras de reparación, por cuyo motivo, ayer también se procedía a trasladar lo poco que se ha salvado del material de oficina hasta el nuevo edificio de la Mancomunidade do Ribeiro, ubicado en el mismo municipio. Allí dispondrán de dos dependencias para atender a los vecinos, que deberán desplazarse 500 metros para realizar sus gestiones.
La explosión también ha dejado ya un conflicto político en la misma localidad: el portavoz socialista, Miguel Ángel Carreiro, presentó una denuncia en el Juzgado de Ribadavia contra el alcalde, su hermana, Mara Pousa, y su nieta (segunda teniente alcalde), Susana Fernández, 'por insultos'. 'Chamáronme instigador e sinaláronme co dedo, dicindo que uns poñen a diana e outros disparan'.
