Manuel, el propietario de Alameda & ItalianJob, de Sáenz Díez, asegura que el robo con violencia que se produjo la madrugada del sábado en su bar pudo haberse evitado si los técnicos de la alarma “hubiesen hecho su trabajo llamando a la policía”.
A las 4,25 horas, el propietario recibió un aviso telefónico de Securitas Direct, quienes le comunicaron que había saltado la alarma de su bar pero que no había indicios de instrusión, por lo que desactivaron temporalmente la misma. Los autores del robo pudieron ver como dejaba de sonar y forzar la puerta de entrada para acceder al negocio.
Una vez dentro hallaron la máquina tragaperras protegida y se dispusieron a forzar la caja. Lograron llevarse 400 euros del fondo de la misma y destrozaron varios aparatos a su paso.
Cuando la camarera llegó a primera hora para abrir, se encontró el negocio abierto y a un vecino que ya había llamado a la Policía Nacional. Los agentes se desplazaron hasta el lugar para recoger pruebas. Además, los especialistas de Científica buscaron posibles huellas para cotejar con su base de datos.
“Lo peor de todo es que la compañía de las alarmas no hiciese bien su trabajo. Si cuando recibieron el aviso hubiesen llamado a los agentes, esto se pudo haber evitado”, señala Manuel. Además añade que “no hicieron fotos ni grabación de sonido, cosa que deben hacer”, indica. Tras hablar con su abogado, les pedirá que le devuelvan lo invertido en ellos en los últimos dos años.
