Los miembros de la agrupación ourensana tuvieron el "placer" de cantar en el altar mayor del templo, una hazaña que pocos consiguen realizar. Al acabar, incluso sonaron las gaitas.
El interior de la basílica de San Pedro vivió ayer su jornada más ourensana. "Foi moi emocionante cantar no altar maior, non é algo que faga todo o mundo", asegura Emilio Rodríguez, vicepresidente de la Coral De Ruada –que celebra sus 100 años en Roma–. La agrupación se encargó de los cantos de la misa, oficiada por el también ourensano arzobispo José Rodríguez Carballo. "Despois da misa, díxonos que por ser nós, e por estar el alí, podiamos tocar algo instrumental, con gaitas galegas, bombo e tamboril", comenta Rodríguez.
Dentro del templo no era momento de foliadas, pero esas las tocaron fuera, en la Plaza de San Pedro. "Tocamos cancións de Ourense, as foliadas da Peroxa, de Entrimo... Cousas nosas", dice. Muchos se pararon frente a la agrupación a disfrutar de la música, y más de uno preguntó de dónde eran originarios. "Levamos a Ourense con nós", comenta el vicepresidente de la agrupación.
Después de la emocionante actuación y todavía sin creérselo mucho, De Ruada visitó la basílica en compañía de José Rodríguez Carballo, que les explicó algunas de las curiosidades del templo. "O único malo, a calor que fai", asegura Rodríguez. Hoy toca "turistear" y mañana viaje de vuelta: "O domingo temos romaría en Oseira"
