El nuevo secretario provincial asegura que el PSOE ourensano "se consolida un partido más fuerte y cohesionado"
El nuevo secretario provincial del PSdeG en Ourense, Rafael Rodríguez Villarino, elegido el pasado sábado tras superar ampliamente a su rival, Noela Blanco, ha subrayado que su objetivo es empezar a trabajar para "recomponer" el partido y, en este aspecto, se ha mostrado convencido de que la victoria lograda en estas primarias pone fin a la "fractura" en el PSOE ourensano.
Después de las desavenencias vividas en los últimos años entre la ejecutiva local y la dirección provincial, el socialista cree que el resultado de las primarias confirma que "la fractura entre la ciudad y la provincia desaparece y se consolida un partido más fuerte y cohesionado" dando con ello por superada la fractura en el PSdeG en la provincia.
Villarino se ha mostrado "satisfecho" de los resultados obtenidos, que lo situaron con el 60 por ciento de apoyos respecto a la diputada ourensana, Noela Blanco.
Preguntado por las declaraciones realizadas por la diputada ourensana, que señaló que el gran vencedor de las primarias había sido el exsecretario general del PSdeG, Pachi Vázquez, Rodríguez Villarino ha opinado que no es "una declaración muy ortodoxa" y acto seguido ha insistido en que su intención es integrar a todo el mundo en la candidatura.
"Somos una candidatura de integración desde el primer momento", ha comentado Villarino, quien ha asegurado que su intención es "hablar con todos" y que están "las puertas abiertas" para que se puedan sumar todos los que quieran formar parte del partido con el objetivo final de poder conformar una alternativa de gobierno.
En este sentido, el socialista, quien ya no forma parte de la dirección gallega para ejercer su puesto al frente de la dirección provincial, ha destacado que el PSOE tiene un doble objetivo que es recuperar el gobierno en la capital orensana y gobernar la diputación de Ourense en 2019 para poder "sacar a esta provincia del furgón de cola" del país.
Para ello, ha indicado que el primer paso es provocar una "movilización social" e intentar contribuir a mejorar los resultados del Partido Socialista en toda la provincia, convencido de que un buen resultado en Ourense impulsaría al PSdeG a nivel gallego.
"Si hacemos que Ourense se convierta en nuevo espacio político, Galicia también lo será", ha indicado el alcalde de Amoeiro, quien cree que el "peso de Ourense sería suficiente para provocar ese cambio en Galicia".
Además, se ha mostrado favorable a que "todas las fuerzas políticas de progreso trabajemos en el mismo barco" para crear un gobierno alternativo al PPdeG.
Entre las metas a corto plazo, el socialista ve fundamental "recuperar el gobierno a la ciudad" y devolver "por primera vez" la institución provincial al pueblo.
Así, ha criticado que la diputación esté "en manos de una familia que gobierna de forma caciquil y clientelar" y que, según ha subrayado, "no ha hecho nada por el desarrollo de la provincia" tras censurar las políticas basadas en el reparto de fondos "clientelar y discrecional", que hacen que Ourense sea una provincia "casi feudal".
