El deterioro de las pozas públicas por el Miño y el retraso en el mantenimiento afean el mayor activo turístico de la ciudad
"Lamentable" y "vergonzoso" son algunos de los calificativos más empleados estos días por los usuarios que visitan las pozas del Muíño da Veiga. Se quejan particularmente de la suciedad de las pozas, una situación que se viene arrastrando desde las últimas crecidas del río Miño sin que se produjeran las correspondientes labores de mantenimiento, lo que ha llevado a algún bañista a "limpiarlas" antes de meterse en el agua. La gota que ha colmado el vaso fue la aparición, este fin de semana, de un neumático en uno de los vasos termales. Los vestuarios cerrados, los baños sin servicio y la bomba de agua averiada son otros de los desperfectos que presentaba la zona y que era ampliamente criticada por los usuarios, toda vez que Ourense es "capital termal" y tiene la mirada de futuro puesta en el termalismo.
La situación parece haber cambiado desde ayer, cuando los operarios de la empresa de limpieza comenzaron a asear las pozas, en unas labores que posiblemente finalicen a lo largo de la jornada de hoy. Según el concejal de Termalismo, José Ángel Vázquez Barquero, la demora en la limpieza se debe a que, aunque hace semanas que el Miño no anega las termas, "el caudal sigue siendo muy alto y es complicado limpiarlas, ya que se necesita un vaciado total de las pozas y si el nivel del río es alto, el vaciado es complicado", explica. Por ello, desde el Concello estaban esperando a que el Miño bajase su caudal, aunque finalmente se ha optado por la limpieza. El concejal también precisa que si los vestuarios y los baños no estaban operativos es precisamente porque las termas tampoco lo estaban, lo que no ha impedido que llegasen igualmente los usuarios en busca de sus aguas termales.
En cuanto al neumático aparecido el pasado fin de semana, Vázquez Barquero lo atribuye al vandalismo, es decir, "cosas que pasan los fines de semana. La Policía Local establece rutinas de vigilancia pero siempre pueden suceder eventualidades de este tipo".
maleza
Además del estado del Muíño da Veiga, los aficionados a pasear por las riberas termales se quejan estos días de la maleza que afecta a algunos de los puntos más transitados, sobre todo los fines de semana. Especialmente llamativo era el estado en el que se encontraba el tramo comprendido entre O Tinteiro y la pista roja, si bien la concejala de Medio Ambiente, Susana Bayo, aseguraba que ayer estaba previsto que se empezara a desbrozar por esa zona.
Según la responsable de Medio Ambiente, en los últimos días los trabajos de desbroce se centraron en los paseos del río Loña y ayer habían arrancado en la pista roja. Su previsión es que "a finales de la semana que viene, todos los paseos fluviales estén perfectamente", tal y como corresponde a una de las zonas más turísticas de la ciudad.
