Cualquier conductor que desee desplazarse de Ourense a Santiago y calcule su ruta en Google, comprobará que el buscador contempla ya el enlace de la autovía AG-53 con la autovía Rías Baixas, pese a que no estará listo hasta 2009.
La velocidad de internet a la hora de informar supera todos los límites conocidos, sobre todo en lo que se refiere a las obras públicas. Mientras los conductores esperan pacientemente a que finalicen las obras del último tramo de la vía de alta capacidad a Santiago (el que une Cea con la autovía Rías Baixas), el buscador más célebre del mundo, Google, ofrece en sus apartados maps y earth (diseñados para calcular rutas y localizar ubicaciones exactas) un detallado itinerario por el último tramo de la autovía AG-53, cuyo remate no está contemplado hasta el próximo año, según confirmaron fuentes de la Consellería de Política Territorial.
De hecho, cualquier conductor que calcule mediante Google la ruta entre Ourense y Santiago de Compostela comprobará que las indicaciones, siempre en busca del trayecto más rápido, le señalan la incorporación a la A-52, tomando la salida 240 en dirección Cortegada para a continuación en la bifurcación, mantente a la izquierda para continuar en dirección AP-53 e incorporarte a AP-53 -utiliza la nomenclatura del tramo entre Dozón y Santiago, no el que une Cea con la A-52-. De ahí, tras 87 kilómetros y el aviso de que se trata de una carretera parcialmente con peajes, fija la llegada a la capital gallega.
Los cierto es que de seguir escrupulosamente estas indicaciones, el trayecto tendría que hacerse parcialmente por el aire o sobre el Miño, ya que el puente que lo tendrá que cruzar para enlazar con la autovía Rías Baixas en Barbantes es una de las infraestructuras del último tramo de la AG-53 que Política Territorial reconoce como de mayor dificultad. No obstante, desde la Xunta ratifican que las previsiones se mantienen para 2009, por lo que hasta entonces los conductores que quieran desplazarse por autovía a Santiago tendrán que tomarla en Cea.
Un error recurrente en la red
Google maps, Vía Michelín y Guía Campsa son los buscadores de rutas más célebres de internet. De ellos, sólo el tercero aporta el trayecto correcto, contemplando que la totalidad de la AG-53 todavía no está operativa. En Vía Michelín también da por hecho que esta vía y la A-52 se unen en Barbantes, indicando esta ruta como la idónea para viajar a Santiago desde Ourense. En la recreación fotográfica de Google earth no aparece el tramo aún en obras, sino una línea que dibuja su recorrido, aunque lo da por hecho a la hora de explicar los pasos a dar.
Más de 190 millones en inversión total
La autovía autonómica AG-53 comienza en el Alto de Santo domingo, en Dozón, -ya en servicio desde el pasado 15 de octubre en su primer tramo, hasta Ceay finaliza en la autovía Rías Baixas (A-52), a la altura de Santa Cruz de Arrabaldo.
El último tramo, actualmente en obras, está previsto que entre en funcionamiento a principios de 2009, tal y como aseguró el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, en el mes de enero, y ratificó la conselleira de Política Territorial, María José Caride, el pasado 21 de julio.
Este último tramo se completará con un nuevo acceso por autovía a Carballiño desde Maside, con cinco kilómetros de longitud y cuyas obras comenzaron en julio. El plazo de ejecución de las mismas es de 16 meses y cuenta con un presupuesto de cerca de 40 millones de euros, de los que cuatro millones se destinaron al pago de expropiaciones.
Una vez que estén completadas las obras de la autovía AG-53, finalizará la conexión en alta capacidad entre la capital de Galicia y Ourense, disminuyendo en un 10 por ciento el recorrido entre Dozón y la capital de As Burgas, con un ahorro de tiempo de 30 minutos en el trayecto a Compostela. Este tramo autonómico hasta Dozón es libre de peaje. El resto, de titularidad estatal (AP-53), cuesta 4,90 euros.
De hecho, cualquier conductor que calcule mediante Google la ruta entre Ourense y Santiago de Compostela comprobará que las indicaciones, siempre en busca del trayecto más rápido, le señalan la incorporación a la A-52, tomando la salida 240 en dirección Cortegada para a continuación en la bifurcación, mantente a la izquierda para continuar en dirección AP-53 e incorporarte a AP-53 -utiliza la nomenclatura del tramo entre Dozón y Santiago, no el que une Cea con la A-52-. De ahí, tras 87 kilómetros y el aviso de que se trata de una carretera parcialmente con peajes, fija la llegada a la capital gallega.
Los cierto es que de seguir escrupulosamente estas indicaciones, el trayecto tendría que hacerse parcialmente por el aire o sobre el Miño, ya que el puente que lo tendrá que cruzar para enlazar con la autovía Rías Baixas en Barbantes es una de las infraestructuras del último tramo de la AG-53 que Política Territorial reconoce como de mayor dificultad. No obstante, desde la Xunta ratifican que las previsiones se mantienen para 2009, por lo que hasta entonces los conductores que quieran desplazarse por autovía a Santiago tendrán que tomarla en Cea.
Un error recurrente en la red
Google maps, Vía Michelín y Guía Campsa son los buscadores de rutas más célebres de internet. De ellos, sólo el tercero aporta el trayecto correcto, contemplando que la totalidad de la AG-53 todavía no está operativa. En Vía Michelín también da por hecho que esta vía y la A-52 se unen en Barbantes, indicando esta ruta como la idónea para viajar a Santiago desde Ourense. En la recreación fotográfica de Google earth no aparece el tramo aún en obras, sino una línea que dibuja su recorrido, aunque lo da por hecho a la hora de explicar los pasos a dar.
Más de 190 millones en inversión total
La autovía autonómica AG-53 comienza en el Alto de Santo domingo, en Dozón, -ya en servicio desde el pasado 15 de octubre en su primer tramo, hasta Ceay finaliza en la autovía Rías Baixas (A-52), a la altura de Santa Cruz de Arrabaldo.
El último tramo, actualmente en obras, está previsto que entre en funcionamiento a principios de 2009, tal y como aseguró el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, en el mes de enero, y ratificó la conselleira de Política Territorial, María José Caride, el pasado 21 de julio.
Este último tramo se completará con un nuevo acceso por autovía a Carballiño desde Maside, con cinco kilómetros de longitud y cuyas obras comenzaron en julio. El plazo de ejecución de las mismas es de 16 meses y cuenta con un presupuesto de cerca de 40 millones de euros, de los que cuatro millones se destinaron al pago de expropiaciones.
Una vez que estén completadas las obras de la autovía AG-53, finalizará la conexión en alta capacidad entre la capital de Galicia y Ourense, disminuyendo en un 10 por ciento el recorrido entre Dozón y la capital de As Burgas, con un ahorro de tiempo de 30 minutos en el trayecto a Compostela. Este tramo autonómico hasta Dozón es libre de peaje. El resto, de titularidad estatal (AP-53), cuesta 4,90 euros.
