Los trabajadores del Festival de Cine aseguran haberse quedado 'flasheados' y 'bastante fastidiados' tras la decisión de suspender 'sine die' la convocatoria de participación para la XVII edición del certamen cinematográfico, cuya celebración ha quedado también, de este modo, en el aire. Mientras la concejala de Cultura y presidenta del Consorcio que rige el OUFF, Isabel Pérez, argumentaba la suspensión de las bases del concurso como 'unha decisión adoptada por prudencia e responsabilidade', los trabajadores la consideran 'precipitada', según traslada el portavoz del festival, Diego González López.
Isabel Pérez había prometido la publicación de la convocatoria para 'antes de que conclúa o mes de abril'. En ese sentido, convocó una rueda de prensa para el pasado lunes, día 30, en la que iba a presentar estas bases. Momentos antes, se produjo una reunión del Consorcio a la que estaban llamados vocales de la Diputación. 'Ó non presentarse ningún deles, tómase a decisión de suspender as bases', relata el portavoz del OUFF. Los trabajadores que durante el año desarrollan toda la programación paralela al Festival de Cine no tenían, pues, noticias previas. De hecho, 'o propio domingo eu estivera preparando propostas de novidades para as bases'.
Ahora, todas las personas implicadas tanto en la semana del festival como en el resto de actividades que lo complementan el resto de meses se encuentran a la espera de mantener un encuentro con Isabel Pérez en el que les explique cuál es el futuro de todas estas iniciativas. 'Non sabemos o que vai pasar, supoño que nos próximos días nos dirán algo'. Así se pronuncia Diego González López, haciéndose eco de la incertidumbre general.
El Festival de Cine, cuya XVII edición garantizó por activa y por pasiva la edil de Cultura en las últimas semanas, está más en el aire que nunca. La aportación económica de la Diputación provincial se antoja impracticable. Los presupuestos, ya aprobados, no incluyen ninguna partida específica en este sentido. Los posibles acuerdos a los que tendrían que llegar para que se implique de algún modo cogieron forma el pasado lunes en boca del presidente, Manuel Baltar, al limitarse a ofrecer el Teatro Principal y el Centro Cultural de la Diputación. Pero el portavoz del OUFF recuerda que durante los últimos años fueron 'escenarios secundarios' en el transcurso del certamen dedicado al cine internacional.
Junto a todas estas consecuencias, Diego González López recuerda que la suspensión del festival tendrá además consecuencias en el sector servicios de la ciudad. 'Nos últimos anos adicabamos uns 100.000 euros entre viaxes e aloxamentos de xeito directo que os hosteleiros da cidade van deixar de recibir os días do certame, ademais do que gastaban os propios participantes do festival, que é algo que nós non temos cuantificado'. Más allá del aspecto económico, el portavoz considera que 'dende un punto de vista como cidade e marca, o nome de Ourense sona no mundo do audiovisual e iso é algo que repercute tamén no eido turístico', recuerda González López.
Ahora, todas las personas implicadas tanto en la semana del festival como en el resto de actividades que lo complementan el resto de meses se encuentran a la espera de mantener un encuentro con Isabel Pérez en el que les explique cuál es el futuro de todas estas iniciativas. 'Non sabemos o que vai pasar, supoño que nos próximos días nos dirán algo'. Así se pronuncia Diego González López, haciéndose eco de la incertidumbre general.
El Festival de Cine, cuya XVII edición garantizó por activa y por pasiva la edil de Cultura en las últimas semanas, está más en el aire que nunca. La aportación económica de la Diputación provincial se antoja impracticable. Los presupuestos, ya aprobados, no incluyen ninguna partida específica en este sentido. Los posibles acuerdos a los que tendrían que llegar para que se implique de algún modo cogieron forma el pasado lunes en boca del presidente, Manuel Baltar, al limitarse a ofrecer el Teatro Principal y el Centro Cultural de la Diputación. Pero el portavoz del OUFF recuerda que durante los últimos años fueron 'escenarios secundarios' en el transcurso del certamen dedicado al cine internacional.
Junto a todas estas consecuencias, Diego González López recuerda que la suspensión del festival tendrá además consecuencias en el sector servicios de la ciudad. 'Nos últimos anos adicabamos uns 100.000 euros entre viaxes e aloxamentos de xeito directo que os hosteleiros da cidade van deixar de recibir os días do certame, ademais do que gastaban os propios participantes do festival, que é algo que nós non temos cuantificado'. Más allá del aspecto económico, el portavoz considera que 'dende un punto de vista como cidade e marca, o nome de Ourense sona no mundo do audiovisual e iso é algo que repercute tamén no eido turístico', recuerda González López.
