La Ribeira Sacra aguarda a que la próxima semana la Unesco tome un veredicto sobre su candidatura a reserva de la biosfera. El Consejo Internacional de Coordinación de Programa Men and Biosphere (MaB) se reunirá el viernes en Nigeria y evaluará su propuesta para dar a conocer que nuevos territorios obtendrán esta categoría. La propuesta lanzada por la Consellería de Medio Ambiente a principios de 2019 encara así la recta final en esta carrera para conseguir este reconocimiento.
La candidatura de la Ribeira Sacra incluye a las sierras de Oribio y del Courel para formar un espacio natural conjunto que aspira a reserva de biosfera. De conseguir este nombramiento, será la segunda más grande de Galicia al abarcar un territorio de 306.534,77 hectáreas, entre Lugo y Ourense. En total, 23 concellos están vinculados a esta candidatura, 18 lucensenses y cinco ourensanos, y que pueden verse beneficiados por una decisión favorable por parte de la Unesco.
Este último paso se alcanza tras haber superado todo un proceso en el que se incluye la aprobación del trámite por parte del Comité Español del Programa MaB, que en noviembre del pasado año avaló la propuesta para declarar reserva de la biosfera a la Ribeira Sacra. Hace unos meses, la Unesco emitió un informe en el que calificaba de “excelente” calidad el proyecto de los promotores que presentaron la candidatura.
La Xunta espera que la Unesco dé el visto bueno para que la Ribeira Sacra se convierta en reserva de la biosfera. En caso de una respuesta positiva, solo quedaría esperar por su publicación en el Boletín Oficial del Estado.
PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD
La Ribeira Sacra también contaba con el trámite para convertirse en Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, una candidatura que se encuentra paralizada. La Xunta y el Gobierno central acordaron un aplazamiento “estratégico” el pasado mes de junio sobre el último paso en este procedimiento. Los examinadores del organismo internacional visitaron en este último año los terrenos de la Ribeira Sacra para evaluar en primera persona todos los bienes paisajísticos y patrimoniales que alberga. Esta pausa busca mejorar la propuesta inicial y así superar los exigentes criterios con más solvencia. n
