Presentarán a través de Stop Accidentes una solicitud de reunión para abordar la situación
La ingente cantidad de atropellos acontecidos en los últimos 15 días -10 concretamente- en el entramado urbano hizo saltar la alarma social. Por ello, promovida por la asociación de vecinos Limiar, tuvo lugar ayer una reunión entre representantes de asociaciones vecinales y miembros del colectivo Stop Accidentes. El objetivo de este encuentro fue "unir fuerzas para presionar al Concello y que empiece a tomar medidas ante la situación", apuntó el colaborador de Stop Accidentes Benito Bouzada.
En la cita, que tuvo lugar en las instalaciones de la asociación Limiar y en la que se pusieron sobre la mesa las principales quejas de los ourensanos, los representantes de los vecinos acordaron por unanimidad presentar en el Consistorio una solicitud de reunión con el alcalde de la ciudad, Jesús Vázquez, la edil responsable de seguridad ciudadana, Flora Moure, la intendente de la Policía Local, María Barrera, y representantes de la Diputación.
"Apostamos de lleno por la pacificación del tráfico, siguiendo el ejemplo de ciudades como Pontevedra, Ovideo, Vitoria o ,sin ir muy lejos, el barrio de Seixalbo, donde ya se han tomado medidas como la zona 30", apuntó Bouzada. "Sabemos que es una cuestión a largo plazo, pero plenamente viable", añadió.
Con todo, "no basta con nuestra inciativa, sino que corresponde al alcalde la toma de una decisión política", dijo el presidente de la asociación Centro, Martín Amaro. "Hay dificultades, pero Ourense se merece un cambio en la ordenación del tráfico y en la peatonalización", insistió.
A la Mesa de Movilidad convocada para el mes de febrero también llegarán las propuestas para tratar de reducir al máximo el número de atropellos en las calles de la ciudad.
Pero la reducción de la siniestralidad no solo depende de los conductores. "También es muy importante la formación en materia vial de los peatones", indicó Bouzada. Lo que está claro es que la convivencia entre viandantes y vehículos es "bastante difícil", por eso "tenemos que tomar conciencia de lo que supone ir caminando e ir conduciendo", dijo Amaro.
