En paralelo, se celebró una feria de productos autóctonos, con 27 puestos que ofrecieron productos de la zona y también hubo una comida popular.
Parada de Sil volvió ayer a rendir homenaje a uno de sus productos estrella en el otoño, la castaña. Lo hizo con una singular iniciativa que ya cumple su quinto año. Una Festa da Pisa que reunió al mediodía en el pueblo de Purdeus a unas 300 personas, que pudieron contemplar esta labor con la que se le retira la cáscara a la castaña, y así conservarla todo el año.
En paralelo, se celebró una feria de productos autóctonos, con 27 puestos que ofrecieron productos de la zona, vinos, quesos, mermeladas, miel, cervezas artesanas y algunos objetos de decoración. La fiesta continuó con una comida popular en la que participaron unos 200 vecinos.
La alcaldesa de Parada, Yolanda Jácome, se mostraba satisfecha por el desarrollo de la jornada. "Parada é hoxe xa un punto de atracción turística importante na Ribeira Sacra e na provincia de Ourense. Estamos construindo futuro".
