Aunque las más famosas sean las bodas de oro existen celebraciones cada año. Sí, todos los años se puede conmemorar un aniversario como casados.
En los matrimonios, un aniversario se define como la fecha en la que la boda se llevó a cabo. Desde ese momento, para muchos el día más especial de su vida, todo ha cambiado. El proyecto en común sigue su curso juntos. Y eso es motivo clarísimo para celebrarlo.
La celebración se remonta a la época romana. Los maridos daban a sus esposas una corona de plata cuando cumplían veinticinco años de casados, en tanto la de oro llegaba a los cincuenta. Por lo tanto, los nombres vienen de lo que se solía regalar en esos aniversarios. Los primeros años se regalaban materiales considerados débiles, a la vez que los más fuertes eran, simbolizando la unión, para los últimos aniversarios.
¿Cómo se llama cada aniversario de bodas?
Al primer año de casados se le denomina como las bodas de papel, al segundo las de algodón. El quinto, las de madera, mientras el décimo es turno para el aluminio. A los veinte años se los conoce como la boda de porcelana, a los veinticinco las de plata; a los treinta, las de perla; a los cuarenta, las de rubí; las bodas de oro llegan a los cincuenta, el platino si son sesenta y cinco. No obstante, en los últimos años, la tendencia es celebrar no solo las de oro, también las bodas de algodón para el segundo año de casados.
Las bodas de oro son las más famosas que existen. Se producen cuando el matrimonio llega a los cincuenta años de casados. Lo ideal es celebrarlo por todo lo alto, reuniendo a la familia y reviviendo el día más especial. Todo debe salir a la perfección. La mayoría de parejas suelen vivir el evento como si fuera el día de su primera boda, nervios a flor de piel, el ramo y el vestido, los invitados, el transporte para llegar a la iglesia.
Renovación de los votos
La renovación de los votos es la confirmación y el reafirmar el juramento de amor eterno, el compromiso y la fidelidad que la pareja hizo el día de su boda. Normalmente, esta celebración es uno de los actos más emotivos que se realizan tras varios años de casados, coincidiendo con una fecha de aniversario significativa de la pareja. No existen reglas de como se debe llevar a cabo, será la pareja la que establezca sus normas.
Este evento es la oportunidad perfecta para reunir a toda la familia, especialmente los nietos y los amigos entrañables que se han conocido con posterioridad a la boda. Es más, si algo gusta de esta celebración es que puede ser un cura o allegado a la pareja la persona que puede oficiar la ceremonia, si bien hijos o nietos es lo más habitual.
En cuanto a los votos se pueden repetir los originales o escribir nuevos que además incluyan nuevos caminos o deseos. Siempre eso sí reafirmando el amor y el compromiso sobre la misma persona. Se puede comenzar por explicar como fue la primera cita o como se conocieron; luego pueden incluir música o frases que suele cantar o decir la pareja, recordar a las personas que hayan pasado a lo largo de su vida o los viajes realizados.
Asimismo, la pareja puede volver a viajar a un destino que deseen, como si fuera una segunda luna de miel, y además comprar nuevos anillos o intercambiarse los suyos. Hay una gran variedad de opciones, muchas de ellas para sorprender a los invitados o a un miembro de la pareja.
Es también una buena oportunidad para celebrar el evento que siempre quisieron. Muchas parejas no pudieron casarse como deseaban, por lo que aprovechan esta celebración para tirar la casa por la ventana. Porque el aniversario de bodas es la fecha más especial para todas las parejas.
