El escritor gallego Manel Loureiro, que con 'La ira de los justos' cierra, por el momento, su trilogía 'Apocalipsis Z', considera que en sus novelas los zombis 'jamás son los protagonistas', sino que le sirven como 'ruido de fondo', puesto que 'no son nada, más allá de una masa invencible'.
Loureiro, que se estrenó en 2005 con un blog en el ciberespacio en el que narraba el fin del mundo por una epidemia zombi, argumenta que el lector, a diferencia de lo que ocurre con los elegantes vampiros, 'no quiere reconocerse en un zombi, porque no tienen ningún atractivo, de manera que se trata de hacer atractivas las historias de los protagonistas humanos'.
Si en sus dos primeros libros, Loureiro describía la acción en una ciudad española y Canarias, en esta ocasión el escenario es mundial porque lo que quería era 'ampliar el campo visual del lector y contar experiencias que sólo eran posibles si se desarrollan en todo el planeta'.
Si en sus dos primeros libros, Loureiro describía la acción en una ciudad española y Canarias, en esta ocasión el escenario es mundial porque lo que quería era 'ampliar el campo visual del lector y contar experiencias que sólo eran posibles si se desarrollan en todo el planeta'.
