Una nueva lengua de lava que se escindió ayer miércoles de la colada principal ha llegado este mediodía a una zona cercana a la playa de El Charcón, en la costa del municipio de Tazacorte. Se trata de un ramal de la colada principal que discurría más al sur que ha llegado al delta lávico que se formó durante la erupción del volcán de San Juan (1949), entre la playa de Los Guirres y El Charcón.
El director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, ha indicado en rueda de prensa que el desgajamiento de este dedo de lava se produjo ayer sobre las 17.00 horas prácticamente al final de la colada principal, a unos 350 metros de su llegada al mar, arrasando más cultivos de plataneras y destrozando varios depósitos y alguna edificación.
Morcuende ha precisado que este desgajamiento se produjo como consecuencia de que el nuevo dedo de lava alcanzó una zona divisoria que ha terminado de llenar y se ha "desparramado" por encima. Añadió que lo más probable es que la zona intermedia entre la morrena terminal de la colada principal y ese dedo se vuelva a llenar, afectando a más cultivos de plataneras.
La ciudadanía está teniendo una respuesta solidaria “brutal” ante la tragedia que sufren los vecinos del Valle de Aridane por la erupción del volcán en La Palma, pues las donaciones en metálico para los afectados superan los 7 millones de euros. El calificativo de “brutal” es del alcalde de El Paso, Sergio Rodríguez, quien concretó que en la cuenta bancaria habilitada por su ayuntamiento se recibieron hasta anteayer unos 600.000 euros; en la de Los Llanos de Aridane, 1,2 millones de euros, y en la del Cabildo de La Palma, 4,1 millones.
Con más de 600 casas destruidas, 6.000 evacuados y la incertidumbre y el miedo ante una erupción en marcha, estas primeras ayudas de particulares y empresas, que vinieron precedidas por envíos de ropa, alimentos o enseres, suponen una inyección de alegría para la isla y así han celebrado sus instituciones este “aluvión de solidaridad que ha llegado de todos los puntos del mundo”.
Además, la erupción volcánica no parece tener prisa, pero el alojamiento de los miles de evacuados y sobre todo de los que han perdido definitivamente sus viviendas, sí es urgente. Por eso, el Gobierno de Canarias, que está embarcado en la búsqueda y compra de viviendas en la isla, se plantea también levantar casas prefabricadas en los municipios de Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte que se podrían tener listas en veinte días.
Los científicos confían en que los daños no vayan a más si de verdad se estabiliza el volcán y el flujo de lava sigue canalizado hacia el mar como está ocurriendo en los últimos días, aunque no se puede asegurar con exactitud.
