El Papa subrayó ayer el valor de 'la constancia y la paciencia' en un mundo como el actual que 'exalta el cambio y la capacidad de adaptarse siempre a nuevas y diferentes situaciones'. 'Sin restar importancia a estos a aspectos, que también son cualidades del ser humano, el Adviento nos insta a potenciar esa tenacidad interior, esa resistencia del ánimo, que permite que no nos desesperemos a la espera de un bien que tarda en llegar', dijo el Pontífice en el rezo del Ángelus dominical desde la plaza de San Pedro del Vaticano. Así, puso de ejemplo al agricultor que espera 'con constancia' el 'precioso fruto de la tierra' desde q
'Sin restar importancia a estos a aspectos, que también son cualidades del ser humano, el Adviento nos insta a potenciar esa tenacidad interior, esa resistencia del ánimo, que permite que no nos desesperemos a la espera de un bien que tarda en llegar', dijo el Pontífice en el rezo del Ángelus dominical desde la plaza de San Pedro del Vaticano. Así, puso de ejemplo al agricultor que espera 'con constancia' el 'precioso fruto de la tierra' desde que recibe las primeras hasta las últimas lluvias.
'Sed constantes y reconfortad vuestros corazones porque la llegada del Señor está cerca', afirmó y recordó que para 'hacer más fuertes los corazones' tenemos la Palabra de Dios. 'Mientras todo cambia, la Palabra del Señor no pasa', agregó.
'Sed constantes y reconfortad vuestros corazones porque la llegada del Señor está cerca', afirmó y recordó que para 'hacer más fuertes los corazones' tenemos la Palabra de Dios. 'Mientras todo cambia, la Palabra del Señor no pasa', agregó.
