Un estudio elaborado por la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT desvela que las profesoras de entre 20 y 30 años con menos de tres de experiencia que trabajan en centros públicos de gran tamaño conforman el perfil con mayor incidencia del estrés entre los docentes de Secundaria.
El secretario de Salud Laboral de FETE-UGT, Francisco Crespo, explicó que este estudio, presentado en Valencia, se realizó a través de 1.125 entrevistas a profesores de Educación Secundaria (ESO) de toda España, a quienes se les preguntó por las situaciones que les provocan mayor estrés a la hora de realizar su trabajo. La falta de respaldo de los padres hacia los profesores ante los problemas de disciplina de los alumnos constituye la principal causa de estrés entre los profesores, siendo más acusada en los centros privados, donde en general los docentes padecen menos estrés.
Otras situaciones estresantes son la poca valoración de la educación por parte de alumnos y padres, la relación cada vez más elevada de estudiantes por clase, así como las peleas entre alumnos y las agresiones físicas o verbales a los profesores. El estudio concluye, además, que cerca del 6 por ciento de los docentes padece el llamado 'síndrome del trabajador quemado', así como que otro 6 por ciento se encuentra en el límite de padecer esta dolencia relacionada con el estrés y que un 8 por ciento presenta algunos síntomas.
GUÍAS Y CAMPAÑAS
Crespo recordó que el estrés está íntimamente relacionado con las bajas laborales de carácter psicológico, que entre los docentes constituyen el 25 por ciento de los casos y son las de mayor duración, así como en otras de tipo psicosomático, como problemas estomacales o dolores de cabeza.
A partir de estos datos, el sindicato va a elaborar una guía que incluirá medidas preventivas para evitar el estrés, entre ellas campañas de sensibilización entre alumnos y progenitores, escuelas de padres, formación para profesores y acciones administrativas. Respecto a esta última medida, Crespo señaló que el profesorado 've con buenos ojos' ser percibido como una autoridad, ya que ello le proporciona mayor seguridad a la hora de ejercer su trabajo. Por eso, una de las prioridades del FETE-UGT. como de la mayoría de sindicatos educativos, es recuperar la autoridad de los docentes, algo que cada vez es menos frecuente y que, muchas veces, se debe a la falta de apoyo de los padres.
Otras situaciones estresantes son la poca valoración de la educación por parte de alumnos y padres, la relación cada vez más elevada de estudiantes por clase, así como las peleas entre alumnos y las agresiones físicas o verbales a los profesores. El estudio concluye, además, que cerca del 6 por ciento de los docentes padece el llamado 'síndrome del trabajador quemado', así como que otro 6 por ciento se encuentra en el límite de padecer esta dolencia relacionada con el estrés y que un 8 por ciento presenta algunos síntomas.
GUÍAS Y CAMPAÑAS
Crespo recordó que el estrés está íntimamente relacionado con las bajas laborales de carácter psicológico, que entre los docentes constituyen el 25 por ciento de los casos y son las de mayor duración, así como en otras de tipo psicosomático, como problemas estomacales o dolores de cabeza.
A partir de estos datos, el sindicato va a elaborar una guía que incluirá medidas preventivas para evitar el estrés, entre ellas campañas de sensibilización entre alumnos y progenitores, escuelas de padres, formación para profesores y acciones administrativas. Respecto a esta última medida, Crespo señaló que el profesorado 've con buenos ojos' ser percibido como una autoridad, ya que ello le proporciona mayor seguridad a la hora de ejercer su trabajo. Por eso, una de las prioridades del FETE-UGT. como de la mayoría de sindicatos educativos, es recuperar la autoridad de los docentes, algo que cada vez es menos frecuente y que, muchas veces, se debe a la falta de apoyo de los padres.
