Una moda aparentemente inocente está amenazando el ecosistema de un monumento natural como es el de la playa de As Catedrais, en Ribadeo. Se trata de apilar pequeñas piedras en forma de pirámide para dejar constancia de la visita, como cuando se usa una navaja para marcar un árbol con el nombre de la persona que estuvo allí. Pero esa costumbre tiene consecuencias sobre el medio ambiente.
El domingo por la noche, un usuario de Twitter denunció la actitud de los turistas y su protesta se ha hecho viral. "Si quieres hacer construcciones, cómprate un Lego, que ahora los están haciendo con materiales reciclados", critica José Ángel Murcia en la red social. Su protesta no ha caído en saco roto. El máximo mandatario de Ribadeo, el alcalde Fernando Suárez, ha emitido un comunicado anunciando que se tomarán medida.
¿Por qué? #PraiaAsCatedrais pic.twitter.com/1pklgrtnNu
— Joseángel Murcia (@tocamates) July 18, 2021
En el texto, el área de Medio Ambiente del Concello de Ribadeo solicita a la Xunta que sus vigilantes eviten esta práctica prohibida en un entorno que está totalmente protegido. "Volvemos a detectar visitantes de este espacio natural protegido que realizan figuras mediante el amontonamiento de piedras existentes en el lugar. Hace años se conseguía poner fin a estos comportamientos, pero por lo que parece, de nuevo es necesario tomar medidas al respecto", condena el documento firmado por Suárez.
También quiero compartir la nota que me pasa el alcalde de Ribadeo, @FSuarezRibadeo, anunciando que se están tomando medidas. Gracias, Fernando. pic.twitter.com/1NndT1fnM3
— Joseángel Murcia (@tocamates) July 19, 2021
El problema de la moda de apilar piedras
En Asia, las culturas budistas y taoístas suelen amontonar rocas como una forma de representación del equilibrio interno. También las culturas andinas de America del Norte y del Sur solían montar túmulos similares en sitios sagrados; y en Irlanda y Escocia los cairns provienen de las tradiciones celtas.
Más allá de los rituales de otras culturas, la moda de apilar piedra presenta una serie de problemas de índole ecológico: cuando se remueven las rocas de lugar, se destruye el hogar de muchas especies que viven y se alimentan en ese lugar.
