El Campus de Ourense cuesta a la Universidad de Vigo 19,5 millones de euros al año. Así se desprende del documento de gastos de contabilidad analítica de la institución académica en 2021. Mantener los centros de investigación es lo más caro, según el citado informe. Con todo, As Lagoas apenas supone un 10% del gasto total de la UVigo en sostenimiento de los tres campus. El central, el de Vigo, se lleva la palma de gasto con más de 80 millones de inversión, que suponen un 45% del gasto total en el año. El Campus de Pontevedra es el que menos cuesta: 16 millones, apenas el 8,8% del gasto total de la universidad en el 2021.
Las facultades ourensanas que mayor desembolso generaron el año pasado por parte de la UVigo son Educación y Empresariales y Turismo, con gran diferencia respecto al resto de centros del Campus. Educación y Trabajo Social costaron 4,6 millones de euros a la institución académica: prácticamente todo el prespuesto (a excepción de 40.000 euros) es para mantener los centros docentes y de investigación.
Le sigue en gasto la Facultad de Empresariales y Turismo, que es una de las que mayor volumen de alumnado concentra al albergar varias titulaciones en el mismo edificio. Este centro supuso en 2021 una inversión de 2,3 millones de la UVigo, la mayoría también para centros docentes.
La lista la continúa Ciencias, una de las facultades en las que se genera mayor investigación internacional. Costó 1,8 millones mantener este centro el año pasado: casi todo el dinero va para los laboratorios y centros de investigación.
Informática costó 1,5 millones e Historia 1,3. Restan dos centros que costaron a la UVigo menos de un millón de euros. Se trata de la Escuela de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio, el centro más nuevo del Campus (se inauguró en 2015 y aún no dispone de edificio propio) y de Derecho. La escuela supuso cerca de 800.000 euros de gasto, casi todo para investigación. La Facultad de Derecho roza el millón, con 975.000 euros de gasto.
El documento también contempla la contabilidad de los llamados “centros soporte”, que están relacionados con labores administrativas. A estos espacios se destinó más de 3 millones. Los aparcamientos, por otro lado, costaron apenas 4.626 euros. La escuela infantil, un centro anexo para uso de la comunidad universitaria, supuso un gasto de más de 28.000 euros.
Hay otros centros de apoyo a la docencia y a la investigación que, aunque no se tratan de facultades, también generan gran parte del gasto total. Es el caso del Centro de Investigación, Transferencia e Innovación de Ourense (CITI), cuyo gasto ascendió a 544.000 euros. Por otro lado, la Biblioteca Rosalía de Castro del Campus necesitó 1,2 millones para su mantenimiento.
Por último, el informe de contabilidad refleja que los centros deportivos del Campus suponen a la UVigo un coste de 1,8 millones.
Como curiosidad, la facultad más cara de toda la institución es la Escuela de Ingeniería Industrial, en Vigo. Supone un desembolso de casi 16 millones, cuatro veces más que lo que cuesta la facultad ourensana más cara (Educación).
