La saturación impidió a Patrulla Felina recoger las cinco crías entregadas al GES, que acabaron en Ourense
El atropello de una gata que había tenido cinco crías acabó con estas en Ourense, adonde las llevó la Diputación provincial, responsable de la recogida de animales callejeros en la comarca. Los recogió del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de o Barco, donde fueron a parar después de que un grupo de jóvenes avisase al Concello.
Previamente, la presencia de las crías de gato en la calle fue comunicada a la protectora local Patrulla Felina, que no pudo hacerse cargo de ellas por estar totalmente saturados. En la actualidad, este colectivo cuida 26 animales en el refugio y tiene una decena más en casas de acogida, según apuntó Lorenzo Abelaira, de la protectora barquense.
El aumento de los casos de abandono y la reducción de las salidas de animales a casa de acogida durante la pandemia fueron dos factores decisivos en provocar la citada saturación. “A pandemia afectou. Os gatos entran e non saen”, comentó el portavoz del colectivo.
El problema se dio durante el cofinanamiento y los meses siguientes de crisis del covid-19. Ahora, las adopciones comienzan a recuperarse y en Patrulla Felina prefieren quedarse con una visión positiva y plantean que la situación no irá a peor. En todo caso, apuntan que, “se non nos saen adopcións, os animais quedarán na rúa. É un pouco frustrante”, expuso Lorenzo Abelaira.
