El mal estado en que se encuentra el firme de la calzada de la N-536, en la travesía de O Barco de Valdeorras, está generando un buen número de quejas entre los vecinos. Los trabajos de bacheo que, en los últimos días, realizó un equipo de mantenimiento es considerado insuficiente por conductores y peatones.
Las irregularidades que aún se aprecian en el firme siguen castigando a los conductores, quienes deben sortear con sus vehículos los baches que aún siguen presentes en el vial. En algún caso, como es el del cruce de las avenidas del Bierzo y Manuel Quiroga, estas maniobras pueden revestir cierto peligro, al ser un punto neurálgico del casco urbano barquense, por el que discurre buena parte del tráfico de la pizarra.
A su vez, los peatones se quejan de la grava que se desprendió del bacheado realizado y que comenzó a deteriorarse; muchas de estas pequeñas piedras son lanzadas hacia las aceras por los vehículos, llegando a impactar con los peatones, según apuntaron ayer fuentes vecinales.
