El servicio de préstamo de bicicletas que el Concello de O Barco de Valdeorras colocó en varios puntos de la villa para su uso por los ciudadanos permanecen durante meses a la intemperie sin que nadie las utilice. Con el paso del tiempo, el deterioro que avanza en ellas es fácilmente observable por los peatones.
El programa Bicibarco, que el Concello creó hace doce años, fruto de un convenio con el Inega (Instituto Enerxético de Galicia). Buscaba promociar este tipo de vehículo para los desplazamientos por el término municipal contempla cuatro lugares para que los usuarios pueden recoger sus bicicletas. Fueron ubicados en las inmediaciones del polideportivo municipal de Calabagueiros, Viloira, San Roque y la plaza de Andrés de Prada.
Los intentos municipales para promocionar el uso de este tipo de vehículos para los desplazamientos no calan en la población y de ello es consciente la concejala de Medio Ambiente, Diana Urdangaray Díaz. “Non funciona”, dijo, refiriéndose a un programa Bicibarco para el que busca un revulsivo. La concejala explicó que pidieron presupuestos a empresas que gestionen el programa con el objetivo de que la adjudicataria “leve o sistema de mantemento”. El Concello también consultó en otros donde esté funcionando este programa de alquiler de bicis al objeto de trasladar a O Barco aquellas mejoras que podrían potenciarlo.
