La junta de personal dice que los partos son "de riesgo" por falta de medios
Los trabajadores del Hospital Comarcal Valdeorras, representados por la Junta de Personal, mostraron su preocupación ante "la situación del mantenimiento de las incubadoras". Se refieren a la avería que una de las dos que posee el centro hospitalario registró el pasado 6 de noviembre. "Desde el momento en que no se dispone de medios (en este caso incubadora para los traslados) todos los partos son considerados de riesgo", afirmaron los representantes de los trabajadores en su respuesta a las explicaciones que dio el Sergas (Servizo Galego de Saúde).
La avería de la incubadora destinada a los traslados fue detectada en el turno de noche por el personal, según explicaron los representantes de la plantilla. Añadieron que el problema fue puesto en conocimiento de los responsables del Hospital, "incluida la empresa responsable del control de estos aparatos". Sin embargo, el fallo no fue subsanado en ese turno.
La Junta de Personal aseguró tener "serias dudas sobre si la empresa responsable (privada) está haciendo los controles pertinentes, ya que las averías son demasiado frecuentes". Añadió que esa misma incubadora falló otras veces, ocasionando problemas. También dice desconocer "el tipo de revisiones y mantenimiento que la empresa realiza sobre este tipo de aparataje, ya que no se hace constar en ningún momento".
A raíz de la avería, los facultativos decidieron trasladar a la mujer al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense.
El Sergas había explicado que el Hospital posee dos incubadoras, una de ellas destinada a trasladar los bebés de un centro a otro, siendo fija la otra. Estas mismas fuentes aseguraron que los dos equipos son revisados cada vez que una mujer entra en el centro para dar a luz, observando el 6 de noviembre que una de ellas no funcionaba, por lo que hubo de ser sustituida.
En referencia a la mujer que acudió al Hospital de O Barco para dar a luz el viernes, el Sergas afirmó que su parto era "de riesgo", por lo cual el ginecólogo y el pediatra decidieron trasladarla a Ourense.
