La sustitución del antiguo campo de fútbol rues de O Aguillón por uno de césped artificial y la carencia de vestuarios y gradas de este último preocupa al Club de Fútbol Rúa, que urge su construcción. El alcalde del PSOE, Luis Fernández Gudiña, baraja la instalación de vestuarios desmontables.
La obra del campo de fútbol de hierba artificial de O Aguillón finalizó hace días en A Rúa. El terreno de juego forma parte del proyecto de remodelación de la zona deportiva, incluida en el Fondo Estatal de Inversión Local, del Ministerio de Fomento. Su presupuesto es de 458.000 euros, pero no incluye la construcción de vestuarios.
Esta carencia fue planteada por una representación del Club Deportivo Rúa al alcalde, el socialista Luis Fernández Gudiña. El Concello baraja la posibilidad de usar provisionalmente los vestuarios del polideportivo, ubicadas a unos 50 metros, aunque deberá tener la aprobación de la Federación Galega de Fútbol.
La necesidad de homologar el terreno de juego fue subrayada por el regidor rues. Sería unha medida de apoio para o inicio da temporada e depende do que esixa a Federación Galega de Fútbol, dijo Luis Fernández Gudiña.
Otra opción es instalar vestuarios prefabricados, que serían usados en tanto no se reúna la financiación suficiente para la construcción de unos nuevos.
Los vestuarios no son la única preocupación de los directivos del CD Rúa, que urgen la construcción de un graderío. Esta obra evitaría seguir los partidos de pie y posibles daños en el césped artificial. El problema es que habrá quien fume y arroje las colillas al campo, comentó un directivo.
Esta carencia fue planteada por una representación del Club Deportivo Rúa al alcalde, el socialista Luis Fernández Gudiña. El Concello baraja la posibilidad de usar provisionalmente los vestuarios del polideportivo, ubicadas a unos 50 metros, aunque deberá tener la aprobación de la Federación Galega de Fútbol.
La necesidad de homologar el terreno de juego fue subrayada por el regidor rues. Sería unha medida de apoio para o inicio da temporada e depende do que esixa a Federación Galega de Fútbol, dijo Luis Fernández Gudiña.
Otra opción es instalar vestuarios prefabricados, que serían usados en tanto no se reúna la financiación suficiente para la construcción de unos nuevos.
Los vestuarios no son la única preocupación de los directivos del CD Rúa, que urgen la construcción de un graderío. Esta obra evitaría seguir los partidos de pie y posibles daños en el césped artificial. El problema es que habrá quien fume y arroje las colillas al campo, comentó un directivo.
