VALDEORRAS

Un error al dibujar un arroyo demorará el PXOM de A Rúa

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photo_camera Praza de Galicia, en A Rúa, por donde debería pasar un arroyo, según la cartografía que maneja la Hidrográfica.

La Hidrográfica restringe la construcción en media villa declarando inundables riberas que no son

Un mapa mal elaborado, con el curso de un arroyo trazado donde no corresponde, causará un nuevo retraso en la aprobación del PXOM, la norma urbanística en la que el Concello de A Rúa comenzó a trabajar en 1999. La cartografía errada es la que maneja la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y según ella, el Regueiro dos Fornos discurre entre Fontei y la Praza de Galicia, cuando en realidad, está cubierto desde Fontei hasta la Praza do Concello, según los datos que maneja el Concello de A Rúa.

A pesar de que la realidad es muy distinta, los documentos válidos son los del organismo de cuenca, que delimitan una amplia zona de flujo preferente, a la que afectaría el desbordamiento del arroyo. La normativa vigente entraña fuertes restricciones para construir en ella, llegando a prohibir toda obra nueva. La limitación afectaría a buena parte del casco urbano, incluida la mayor zona de desarrollo urbanístico recogida en el PXOM.

La alcaldesa nacionalista de A Rúa, María González Albert, llevó este problema a la reunión que ayer mantuvo con el presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Marín Muñoz, quien mostró su total disposición a corregir el error. En los próximos días, un equipo de técnicos se desplazará hasta la localidad ruesa para buscar una solución a este y otros problemas existentes en cuestiones que competen al citado organismo.

La alcaldesa, María González, explicó que la Confederación Hidrográfica había remitido al Concello toda la planimetría, sin que este presentase alegación alguna, por lo que los mapas fueron aprobados, a pesar de que no se ajustaban a la realidad. "O Concello non alegou no seu momento e agora é máis difícil", explicó.

Este problema retrasará la aprobación de un PXOM, cuya redacción comenzó hace 16 años y que fue afectado por dos modificaciones de leyes, que propiciaron dos aprobaciones provisionales, en 2008 y 2014.

Además de lograr el visto bueno de la Confederación Hidrográfica, el Concello deberá incorporar el estudio informativo de la A-76, además de atender otras exigencias menos importantes de la Secretaría Xeral de Urbanismo para que la Xunta de la aprobación definitiva al PXOM.

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