Los dos embotelladores resaltan la buena acogida obtenida por el producto que validó la Xunta

Europa aprueba el espumoso con sello de la Denominación

Cristina Murga, Durante la presentación de su champán, en O Barco.
La Comisión Europea de Agricultura y Desarrollo Rural autorizó inicialmente la distribución del espumoso valdeorrés con el sello de la Denominación de Origen vitivinícola. Lo anunció el presidente del Consello Regulador, José Luis García Pando. 'Non puxo pegas ao espumoso nin ao tostado. Xustificamos que había tradición no tostado e que algunha adega xa elaboraba espumoso', dijo. Ahora, el responsable del organismo vitivinícola aguarda por la confirmación oficial del visto bueno de la Unión Europea (UE).
La aprobación del pliego de condiciones que refleja las características de espumosos y tostados es un trámite obligado desde que se puso en marcha la Organización Común de Mercados (OCM) del vino. 'Es un requisito que hay que pasar', explicó el director técnico del Consello Regulador, Jorge Mazaira Pérez. Antes de solicitar la aprobación europea para estos dos productos fue preciso pedir la de la Consellería do Medio Rural e do Mar, que se la otorgó en 2009.

La primera bodega que comercializó el espumoso valdeorrés al amparo de la Denominación fue Roandi, cuyas instalaciones están ubicadas en Éntoma (O Barco). Esta campaña sacó 5.000 botellas de blanco, que produjo a partir de un vino base de godello, y 4.000 de rosado, elaborado con mencía, sousón y albarello. Su gerente, Gerardo Rodríguez Álvarez, considera que la UE sólo puede corroborar la aprobación de esta bebida. 'El espumoso está perfectamente documentado. Hay antecedentes desde 2003. En principio, la UE lo único que tiene que hacer es ratificarlo', dijo.

Gerardo Rodríguez resaltó la buena acogida de los espumosos de Roandi. Comentó que la bodega recibió pedidos enviados desde Bélgica, Alemania o Suiza. Pero destacó su presencia en los restaurantes y tiendas especializadas en productos gallegos de Cataluña. Entiende que el referéndum acerca del independentismo está jugando una mala pasada a los productores de cava. 'Hay mucha gente que nos dice que está buscando un espumoso que no tenga que ver con Cataluña. Los mismos catalanes son conscientes del daño', comentó.

Cristina Murga Macías no apreció que la demanda de sus espumosos aumentase debido a la reivindicación independentista catalana. Sí lo comprobó hace una década, a raíz de una polémica similar. 'En 2003-2004 sí se notó. Hicimos 3.000 botellas y se agotaron', comentó. Ahora, al frente de su propia bodega, Fragamoura, subraya el respaldo que su producto encontró en el mercado. Son 2.500 botellas elaboradas con godello y dona branca y 150 de uva branco lexítimo. Su clientela está repartida por Galicia, Castilla y León, Asturias y Madrid, según djio.

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