Las frías temperaturas del año pasado favorecieron la elaboración de unos vinos blancos de godello excepcionales. Lo afirmó ayer el presidente de la Asociación Galega de Catadores, Luis Paadín, después de dirigir una cata de 44 blancos y 36 tintos de la Denominación Valdeorras. É unha añada da que se vai falar moito tempo, aseguró. No sucede lo mismo con los mencías, cuya calidad no alcanza ese nivel. Además, los participantes se mostraron sorprendidos por la experiencia del tostado de garnacha.
La última añada de vinos blancos elaborados con una godello en la Denominación de Orixe Valdeorras es excepcional. Lo afirmó ayer el presidente de la Asociación Galega de Catadores, Luis Paadín, después de participar en la cata organizada en la sede vilamartinesa del Consello Regulador, en la que participaron 10 asociados del citado colectivo.
Atribuyó las excelentes cualidades de los godellos a las frías temperaturas que se registraron el año pasado y ao bon facer dos viticultores, según apuntó Luis Paadín.
Entre las características más destacadas de estos caldos, el portavoz de los catadores apuntó su frescor en boca y también la acidez natural, que permitirá un largo periodo de envejecimiento. Ante estas cualidades, aseguró que é unha añada da que se vai falar moito tempo.
Fueron 44 los vinos blancos catados en el Consello Regulador, todos ellos godellos. Además, la representación de la Asociación Galega de Catadores examinó las cualidades de 36 vinos tintos, éstos mayoritariamente elaborados con uvas de mencía, aunque en algún caso con alguna pequeña cantidad de uva garnacha añadida.
Los participantes no encontraron tantas cualidades en los tintos, limitándose el presidente de la asociación a apuntar que algúns teñen máis color e outros andan máis curtos.
Una apuesta por los tostados de garnacha
Durante su estancia en Vilamartín, los catadores gallegos descubrieron las bondades de los vinos dulces con uvas de la variedad garnacha. Lo señaló el presidente de la Asociación Galega de Catadores después de catar los vinos de la Denominación de Orixes. É algo sorprendente, comentó.
Paadín se mostró entusiasmado con los resultados de la experiencia desarrollada por el Consello Regulador. É unha opción vella que compre as expectativas, afirmó, refiriéndose a la posibilidad de producir estos vinos tostados que experimenta el Consello Regulador y que son elaborados con uvas garnacha deshidratadas.
Éste es el primer año que el Consello Regulador experimenta con tostados y sus resultados más que satisfactorios ya despertaron el interés de alguna bodega de la Denominación de Orixe. En todo caso, aún habrá que esperar un par de años para poder extraer conclusiones definitivas. Lo apuntó Jorge Mazaira, técnico del organismo vitivinícola valdeorrés que dirigió la experiencia. Son vinos a los que les hace falta que pase el tiempo, dijo.
Los planes de este técnico pasan por aumentar la producción para el año próximo y meter en una barrica una parte del caldo para examinar los resultados.
Atribuyó las excelentes cualidades de los godellos a las frías temperaturas que se registraron el año pasado y ao bon facer dos viticultores, según apuntó Luis Paadín.
Entre las características más destacadas de estos caldos, el portavoz de los catadores apuntó su frescor en boca y también la acidez natural, que permitirá un largo periodo de envejecimiento. Ante estas cualidades, aseguró que é unha añada da que se vai falar moito tempo.
Fueron 44 los vinos blancos catados en el Consello Regulador, todos ellos godellos. Además, la representación de la Asociación Galega de Catadores examinó las cualidades de 36 vinos tintos, éstos mayoritariamente elaborados con uvas de mencía, aunque en algún caso con alguna pequeña cantidad de uva garnacha añadida.
Los participantes no encontraron tantas cualidades en los tintos, limitándose el presidente de la asociación a apuntar que algúns teñen máis color e outros andan máis curtos.
Una apuesta por los tostados de garnacha
Durante su estancia en Vilamartín, los catadores gallegos descubrieron las bondades de los vinos dulces con uvas de la variedad garnacha. Lo señaló el presidente de la Asociación Galega de Catadores después de catar los vinos de la Denominación de Orixes. É algo sorprendente, comentó.
Paadín se mostró entusiasmado con los resultados de la experiencia desarrollada por el Consello Regulador. É unha opción vella que compre as expectativas, afirmó, refiriéndose a la posibilidad de producir estos vinos tostados que experimenta el Consello Regulador y que son elaborados con uvas garnacha deshidratadas.
Éste es el primer año que el Consello Regulador experimenta con tostados y sus resultados más que satisfactorios ya despertaron el interés de alguna bodega de la Denominación de Orixe. En todo caso, aún habrá que esperar un par de años para poder extraer conclusiones definitivas. Lo apuntó Jorge Mazaira, técnico del organismo vitivinícola valdeorrés que dirigió la experiencia. Son vinos a los que les hace falta que pase el tiempo, dijo.
Los planes de este técnico pasan por aumentar la producción para el año próximo y meter en una barrica una parte del caldo para examinar los resultados.
