Los destrozos que la granizada del viernes causó en los viñedos de Vilamartín, O Barco y Rubiá fueron devastadores.
Aunque aún es pronto para conocer la totalidad de los daños, el presidente del Consello Regulador de la Denominación de Orixe Valdeorras no dudó en resaltar su importancia y calificarlos de ese modo. 'Pasei por algunhas viñas e estaban como se lles cortasen cunha pequena fouce ás follas. Aínda así, o bago é pequeño; se fose máis grande, sería un desastre total. Agora hai que cuidar o que queda, pois pode entrar o mildiu polas follas danadas', recomendó José Luis García Pando, una vez finalizado el acto inaugural de la XVI Feira do Viño de Valdeorras, cuya reapertura por la tarde se retrasó debido a la tormenta caída de nuevo ayer, aunque sin granizo.
Pero el hielo caído el viernes no solo arrasó las viñas de Valdeorras, sino que también dañó notablemente, el jueves, la producción en la comarca de O Ribeiro, sobre todo en Castrelo de Miño, el municipio de esa denominación más afectado.
De hecho, los efecto de la tormenta estuvieron presentes en todo momento en el evento que organizaron el Consello Regulador de la Denominación de Orixe Valdeorras y el Concello de A Rúa para dar a conocer los productos de las bodegas de la Denominación de Orixe Valdeorras. Porque el granizo castigó muchas viñas de O Barco y Rubiá que ya habían sufrido las consecuencias de las heladas de mayo y cuyas pérdidas fueron estimadas en un 80 % por el presidente de la barquense bodega cooperativa Jesús Nazareno, Manuel Fernández Pérez y los técnicos del propio Consello Regulador. 'Unha encima de outra', lamentó ayer su presidente.
En su intervención en el acto inaugural de la Feira do Viño, José Luis García Pando tuvo palabras de ánimo para bodegueros y viticultores. Tampoco se olvidó de las administraciones, a las que reclamó ayudas para paliar las pérdidas. 'Nestes momentos, a adegueiros e viticultores só lles podo dar ánimo, esperemos que as Administracións lles poidan ofrecer outra cousa', dijo.
La primera ayuda de la Administración llegó en forma de recomendación y la ofreció el secretario xeral de Medio Rural e Montes, Tomás Fernández Couto, a los productores de Valdeorras y de O Ribeiro. 'A liña para as produccións primarias é a do seguro. A tranquilidade para un productor ten que vir de ter debidamente aseguradas as súas produccións', manifestó.
VISITA A LOS DAÑOS CAUSADOS
El presidente de la Diputación, Manuel Baltar, también estuvo en A Rúa y se refirió a los estragos del granizo. Es más, minutos antes de dirigirse al recinto ferial viajó a Córgomo, acompañado por la alcaldesa de Vilamartín, María Jesusa Candal Jarrín. En este pueblo, uno de los más castigados por la piedra, conoció las viñas dañadas. 'Teño que lamentar que vos visitase onte o granizo', dijo.
Julio Ricarte Mateu, enólogo de la ruesa bodega cooperativa Virgen de las Viñas, abrió una puerta a la esperanza y explicó que la lluvia que acompañó al granizo aminoró la violencia de la tormenta en algunas otras zonas de la comarca. Añadió que algunos viñedos de socios de Córgomo fueron dañados, pero salió indemne el resto del viñedo de A Rúa.
Un certamen con 22 bodegas
El alcalde de A Rúa y el secretario xeral de Medio Rural e Montes, Avelino García Ferradal y Tomás Fernández, respectivamente, cortaron la cinta colocada a la entrada del recinto de la 'XVI Feira do Viño de Valdeorras', que se desarrolla en O Aguillón.
En su interior colocaron sus productos 22 bodegas de la Denominación de Orixe. La cita, que pretende dar a conocer el sector en todo el país, también se acompaña de expositores de los concellos hermanados de Almendralejo y A Rúa, al igual que hizo el propio Consello Regulador, para explicar su labor.
Los sones de la Banda de Gaitas Abertal de A Rúa iniciaron un programa de actividades que también incluyó la actuación del humorista Rober Bodegas. El monologuista explicó que, a pesar de su apellido, fue la primera vez que acudió como invitado a una feria vinícola, un agradecimiento que no libró a la organización de algunas de sus críticas.
El programa de hoy incluye la actuación de la Banda de Gaitas de la Diputación y la elaboración de varios platos en directo.
Un sector que busca en la exportación superar la crisis
La apuesta de las bodegas de la Denominación de Orixe por la exportación es rotunda. Este crecimiento aparece expuesto en los datos que facilitó el Consello Regulador. Reflejan que desde el año 2007, inicio de la crisis económica, hasta 2012 las exportaciones pasaron de 209.577 a 263.645 litros. El dato no coincide con el 120 % de aumento en el último lustro, que dio el secretario xeral de Medio Rural. En todo caso, ambos reflejan una tendencia exportadora que es bien vista por una Consellería que destinó 1,5 millones de euros a impulsar la internacionalización del vino y 3,5 millones a estructurar y profesionalizar la producción.
Pero el hielo caído el viernes no solo arrasó las viñas de Valdeorras, sino que también dañó notablemente, el jueves, la producción en la comarca de O Ribeiro, sobre todo en Castrelo de Miño, el municipio de esa denominación más afectado.
De hecho, los efecto de la tormenta estuvieron presentes en todo momento en el evento que organizaron el Consello Regulador de la Denominación de Orixe Valdeorras y el Concello de A Rúa para dar a conocer los productos de las bodegas de la Denominación de Orixe Valdeorras. Porque el granizo castigó muchas viñas de O Barco y Rubiá que ya habían sufrido las consecuencias de las heladas de mayo y cuyas pérdidas fueron estimadas en un 80 % por el presidente de la barquense bodega cooperativa Jesús Nazareno, Manuel Fernández Pérez y los técnicos del propio Consello Regulador. 'Unha encima de outra', lamentó ayer su presidente.
En su intervención en el acto inaugural de la Feira do Viño, José Luis García Pando tuvo palabras de ánimo para bodegueros y viticultores. Tampoco se olvidó de las administraciones, a las que reclamó ayudas para paliar las pérdidas. 'Nestes momentos, a adegueiros e viticultores só lles podo dar ánimo, esperemos que as Administracións lles poidan ofrecer outra cousa', dijo.
La primera ayuda de la Administración llegó en forma de recomendación y la ofreció el secretario xeral de Medio Rural e Montes, Tomás Fernández Couto, a los productores de Valdeorras y de O Ribeiro. 'A liña para as produccións primarias é a do seguro. A tranquilidade para un productor ten que vir de ter debidamente aseguradas as súas produccións', manifestó.
VISITA A LOS DAÑOS CAUSADOS
El presidente de la Diputación, Manuel Baltar, también estuvo en A Rúa y se refirió a los estragos del granizo. Es más, minutos antes de dirigirse al recinto ferial viajó a Córgomo, acompañado por la alcaldesa de Vilamartín, María Jesusa Candal Jarrín. En este pueblo, uno de los más castigados por la piedra, conoció las viñas dañadas. 'Teño que lamentar que vos visitase onte o granizo', dijo.
Julio Ricarte Mateu, enólogo de la ruesa bodega cooperativa Virgen de las Viñas, abrió una puerta a la esperanza y explicó que la lluvia que acompañó al granizo aminoró la violencia de la tormenta en algunas otras zonas de la comarca. Añadió que algunos viñedos de socios de Córgomo fueron dañados, pero salió indemne el resto del viñedo de A Rúa.
Un certamen con 22 bodegas
El alcalde de A Rúa y el secretario xeral de Medio Rural e Montes, Avelino García Ferradal y Tomás Fernández, respectivamente, cortaron la cinta colocada a la entrada del recinto de la 'XVI Feira do Viño de Valdeorras', que se desarrolla en O Aguillón.
En su interior colocaron sus productos 22 bodegas de la Denominación de Orixe. La cita, que pretende dar a conocer el sector en todo el país, también se acompaña de expositores de los concellos hermanados de Almendralejo y A Rúa, al igual que hizo el propio Consello Regulador, para explicar su labor.
Los sones de la Banda de Gaitas Abertal de A Rúa iniciaron un programa de actividades que también incluyó la actuación del humorista Rober Bodegas. El monologuista explicó que, a pesar de su apellido, fue la primera vez que acudió como invitado a una feria vinícola, un agradecimiento que no libró a la organización de algunas de sus críticas.
El programa de hoy incluye la actuación de la Banda de Gaitas de la Diputación y la elaboración de varios platos en directo.
Un sector que busca en la exportación superar la crisis
La apuesta de las bodegas de la Denominación de Orixe por la exportación es rotunda. Este crecimiento aparece expuesto en los datos que facilitó el Consello Regulador. Reflejan que desde el año 2007, inicio de la crisis económica, hasta 2012 las exportaciones pasaron de 209.577 a 263.645 litros. El dato no coincide con el 120 % de aumento en el último lustro, que dio el secretario xeral de Medio Rural. En todo caso, ambos reflejan una tendencia exportadora que es bien vista por una Consellería que destinó 1,5 millones de euros a impulsar la internacionalización del vino y 3,5 millones a estructurar y profesionalizar la producción.
