José Manuel Fernández Anguiano conoce bien la estación de montaña de Manzaneda. Participó en su puesta en marcha y la dirigió durante más de una década.
José Manuel Fernández Anguiano conoce bien la estación de montaña de Manzaneda. Participó en su puesta en marcha y la dirigió durante más de una década. Estos conocimientos le permiten felicitar a los actuales gestores de Oca Nova Manzaneda por los cambios que han introducido y afirmar que es fundamental la innivación artificial.
¿Cómo comenzó Meisa?
El 12 de mayo de 1972, José Luis Outeiriño y yo fuimos al notario para crear la empresa Estación de Invierno Manzaneda SA, que gestionó y desarrolló la estación de esquí y de montaña.
¿Cómo surgió la idea?
Había un club, el Club Alpino Manzaneda, al que íbamos con la familia porque nos gustaba la montaña, la nieve. Yo estudié en Pamplona y allí me aficioné al esquí. Íbamos a Candanchú en la década de 1950. Como conocía bien el Club, vimos que había gente que iba y, animados por el alcalde de Trives, César Fernández, empezamos a pensar en hacer algo. Había posibilidades, sitio y afición. Entonces, creamos la empresa Meisa.
¿De qué época datan los apartamentos?
En 1975, teníamos el hotel Queixa y ardió en la madrugada del 5 de diciembre. Decidimos construir los apartamentos Queixa en el solar. Hicimos un plan de ordenación de las 345 hectáreas que ocupaban los terrenos de la estación. Al mismo tiempo, realizamos un proyecto para los apartamentos Galicia, que terminamos en el año 1978. Fue cuando Meisa vivió su eclosión hotelera.
¿Cuál es su opinión de la estación actual?
Se está recuperando. Hay otros conceptos de gestión, otras personas que gestionan la estación y creo que lo están haciendo de forma acertada. Está volviendo la clientela que durante algunos años, por un poco de falta de criterio, se había perdido. Ahora, en este último año se están recuperando, sobre todo, los clientes portugueses y gallegos. El único problema actual es la falta de nieve.
¿Es importante la innivación?
Resulta fundamental. La nieve, que fue el leitmotiv de la estación de montañade Manzaneda, se fue perdiendo y nunca se hizo nada. Es imprescindible para que Manzaneda vuelva a ser un emporio de riqueza.
¿Puede competir con las demás estaciones del norte?
San Isidro y Alto Campóo consiguieron salvar el bache de la nieve con instalaciones serias de nieve artificial. Estaciones más pequeñas, como Leitariegos, también las tienen y garantizan la nieve durante el invierno. Ahí se nos va el potencial gallego de esquiadores.
