Rompieron la puerta de entrada y también marcharon con dinero, joyas, un ordenador

Los ladrones roban tres pisos de O Barco y se llevan los regalos de la Noche de Reyes

Edificio donde fueron cometidos los tres robos
Los ladrones desvalijaron tres pisos de un céntrico edificio de la calle Academia Dequidt, en O Barco. Accedieron tras reventar las puertas de entrada y se llevaron joyas, teléfonos móviles, un ordenador y los regalos que una de las familias guardaba para la Noche de Reyes.
Los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de A Rúa investigan los robos cometidos en tres pisos de un edificio del centro de O Barco, el número ocho de la calle Academia Dequidt. Los hechos sucedieron durante la tarde del domingo pasado y los ladrones se llevaron los objetos de valor que encontraron, incluidos los regalos que los propietarios de una de las viviendas guardaban para la Noche de Reyes.

El robo fue cometido entre las 14,00, cuando el propietario de uno de los pisos robados abandonó su piso, y las 18,00 horas, momento en que fue advertido el robo. Si bien no trascendió la cuantía de los objetos robados sí pudo saberse que los ladrones se llevaron varios dvds, teléfonos móviles, joyas, dinero y un ordenador.

Los autores accedieron al interior de las viviendas tras romper la parte inferior de las puertas a patadas. También intentaron acceder a otros pisos, como demuestran las huellas de zapatos dejadas en otras puertas de este mismo edificio. Ya en el interior de las viviendas, no provocaron más desperfectos.


La villa vivió hechos parecidos en octubre

Antes de desvalijar los pisos, los ladrones llamaron a los porteros automáticos para comprobar si sus propietarios están dentro. El método es muy parecido al utilizado en varios robos también cometidos en viviendas durante el mes de octubre del año pasado, aunque en aquellos días los autores mostraron una clara preferencia por el dinero en efectivo, marchándose sin los objetos de valor que tenían a su alcance.

Por otra parte, el objetivo que se fijaron hace tres meses fueron las plantas altas de las casas, pues les permitía robar sin ser molestados por los vecinos que utilizan las escaleras. Pese a estas peculiaridades, el temor a que pueda repetirse una racha de robos como la del 2008 causó preocupación entre los vecinos.

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