Las obras de la torre y de una cueva se finalizarán durante el verano

Una plaza cubre los restos arqueológicos de O Castro

Acceso a la fortaleza.
Una plaza cubrió los restos arqueológicos castreños y romanos de O Castro (O Barco). Fueron investigados por el arqueólogo valdeorrés Santiago Ferrer Sierra quien fechó la última etapa del asentamiento en el siglo IV y dató la más antigua en el periodo prerromano o castreño, que finalizó en el siglo I antes de Cristo.
En un principio, el Concello planteó dejar al descubierto la parte superior del yacimiento arqueológico, opción que descartó la Dirección Xeral de Patrimonio. Al final, fue cubierto con la plaza.

La mejora del entorno y de la fortaleza de O Castro, declarada Bien de Interés Cultural en 1970, fue adjudicada en 509.891 euros a Resconsa en 2013 y forma parte del 1 % del presupuesto que el Ministerio de Fomento destina a actuaciones culturales. En su financiación también colabora el Concello de O Barco, que aporta el 25 %. El proyecto fue completado con la consolidación de la Cova do Polbeiro, cuyo mal estado hacía peligrar la estabilidad de la torre, situada a escasos metros y en la zona superior del pueblo. Su presupuesto es de 39.547 euros, aportando 32.729 la Asociación Galega de Desenvolvemento Rural, dependiente de la Consellería do Medio Rural e do Mar. El resto lo asumieron las arcas municipales.

Una vez finalizada la urbanización del entorno, la obra de albañilería de la torre de O Castro está prácticamente rematada, según explicó ayer el alcalde, Alfredo García Rodríguez. Añadió que resta la estructura metálica del mirador que contempla el proyecto, que debería estar rematada en este verano.

Te puede interesar