El alcalde retomó el proyecto de Repsol Gas para llevar el gas propano a las viviendas ruesas. La iniciativa fue impulsada en 1996 por el entonces regidor, José Vicente Solarat.
Los trabajos de construcción de la red de gas propano en A Rúa comenzarán después del verano si se cumplen los planes del equipo de gobierno. Lo apuntó ayer el alcalde rues del PSdeG-PSOE, Luis Fernández Gudiña. El regidor llevará al pleno del próximo jueves la firma del convenio con Repsol Gas para instalar las conducciones necesarias.
No es la primera vez que la Corporación municipal debate la gasificación de A Rúa. Los primeros contactos datan de 1996, cuando la alcaldía estaba en manos del independiente José Vicente Solarat. En aquellas fechas comenzó con fuerza la tramitación de un proyecto que, poco a poco, se fue durmiendo, hasta quedar aparcado.
José Vicente Solarat recuerda que en aquellos momentos se manejó un proyecto de construcción con un coste estimado en 480.000 euros (80 millones de las viejas pesetas). Pasados 14 años, las cifras que maneja Luis Fernández Gudiña se aproximan a los 600.000 euros. Pese a ello, el presupuesto podría disminuir pues todas las obras de urbanización ejecutadas en la villa ruesa desde que comenzaron los contactos con la compañía gasística incluyen conducciones para el gas propano, con lo que la empresa se ahorra su construcción, según indicó el ex regidor.
El convenio que pretende firmar Luis Fernández Gudiña incluye la ubicación de los depósitos de almacenamiento y las calles que abarcará el proyecto. Este documento también reflejará los condicionantes que planteó el equipo de gobierno, como la reposición del estado actual en las calles que sean abiertas para introducir las conducciones.
Los depósitos de almacenamiento serán colocados en la zona denominada 'A Graveira', tal y como Repsol Gas y Concello habían acordado en sus primeros contactos. Esta ubicación fue decidida debido a su relativa lejanía del casco urbano, del que dista unos 500 metros. La situación aleja el peligro pero no es suficiente para que la empresa gasística pueda acometer cualquier trabajo sin excesivas complicaciones.
Son dos los depósitos de gas propano proyectados, cada uno con 49.500 litros de capacidad. Así consta en el documento que se quiere firmar en abril.
No es la primera vez que la Corporación municipal debate la gasificación de A Rúa. Los primeros contactos datan de 1996, cuando la alcaldía estaba en manos del independiente José Vicente Solarat. En aquellas fechas comenzó con fuerza la tramitación de un proyecto que, poco a poco, se fue durmiendo, hasta quedar aparcado.
José Vicente Solarat recuerda que en aquellos momentos se manejó un proyecto de construcción con un coste estimado en 480.000 euros (80 millones de las viejas pesetas). Pasados 14 años, las cifras que maneja Luis Fernández Gudiña se aproximan a los 600.000 euros. Pese a ello, el presupuesto podría disminuir pues todas las obras de urbanización ejecutadas en la villa ruesa desde que comenzaron los contactos con la compañía gasística incluyen conducciones para el gas propano, con lo que la empresa se ahorra su construcción, según indicó el ex regidor.
El convenio que pretende firmar Luis Fernández Gudiña incluye la ubicación de los depósitos de almacenamiento y las calles que abarcará el proyecto. Este documento también reflejará los condicionantes que planteó el equipo de gobierno, como la reposición del estado actual en las calles que sean abiertas para introducir las conducciones.
Los depósitos de almacenamiento serán colocados en la zona denominada 'A Graveira', tal y como Repsol Gas y Concello habían acordado en sus primeros contactos. Esta ubicación fue decidida debido a su relativa lejanía del casco urbano, del que dista unos 500 metros. La situación aleja el peligro pero no es suficiente para que la empresa gasística pueda acometer cualquier trabajo sin excesivas complicaciones.
Son dos los depósitos de gas propano proyectados, cada uno con 49.500 litros de capacidad. Así consta en el documento que se quiere firmar en abril.
