Cientos de fieles acudieron ayer a los actos religiosos en honor a San Antonio de Padua.
Los actos comenzaron en la capilla de Cedie, en O Barco, de donde partió la procesión que finalizó en las instalaciones deportivas. La misa se desarrolló sobre la pista del pabellón polideportivo de Calabagueiros, donde tiene lugar la bendición de los novios, los niños y los panes. Con motivo de esta festividad, algunas panaderías de la villa barquense obsequiaron a sus clientes con un bollo de pan.