El Concello de O Barco expedientó a dos constructores por verter en el polígono industrial. Afrontan multas de 300 euros, que aumentarán si no retiran los residuos. El alcalde, Alfredo García, anuncia “tolerancia cero con los vertidos incontrolados”.
“El Concello tendrá tolerancia cero con los vertidos incontrolados”. Así de rotundo se pronunció el alcalde de O Barco, el socialista Alfredo García, después de anunciar la apertura de expedientes sancionadores a dos contratistas por arrojar residuos en el recinto del parque empresarial de A Raña. Actualmente, varias máquinas proceden a la urbanización de la segunda y tercera fases.
Los empresarios sancionados se enfrentan a multas de 300 euros, que aumentarán si no retiran sus vertidos. Fueron localizados por los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil del puesto barquense.
“Se les explicó que no se podían echar escombros e hicieron caso omiso”, dijo el alcalde que considera que “no hay razones para arrojarlos fuera del vertedero de inertes de A Rúa y depositar otros materiales en el Punto Limpio de O Barco”.
El equipo de gobierno solicitó a la Consellería de Medio Ambiente la construcción de una planta de tratamiento de residuos de la construcción. “En O Barco es una necesidad que va en aumento”, señaló el regidor. El alcalde indicó que el vertedero de inertes de A Rúa está próximo a agotar su capacidad. En esa planta se separan materiales procedentes de las construcciones, reciclando aquellos que pueden volver a utilizarse mientras los que ya no sirven son arrojados a un vertedero.
Los empresarios sancionados se enfrentan a multas de 300 euros, que aumentarán si no retiran sus vertidos. Fueron localizados por los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil del puesto barquense.
“Se les explicó que no se podían echar escombros e hicieron caso omiso”, dijo el alcalde que considera que “no hay razones para arrojarlos fuera del vertedero de inertes de A Rúa y depositar otros materiales en el Punto Limpio de O Barco”.
El equipo de gobierno solicitó a la Consellería de Medio Ambiente la construcción de una planta de tratamiento de residuos de la construcción. “En O Barco es una necesidad que va en aumento”, señaló el regidor. El alcalde indicó que el vertedero de inertes de A Rúa está próximo a agotar su capacidad. En esa planta se separan materiales procedentes de las construcciones, reciclando aquellos que pueden volver a utilizarse mientras los que ya no sirven son arrojados a un vertedero.
