En O Aguillón acampan 40 de las más de 800 personas que trabajan en la campaña de recogida
El área recreativa de O Aguillón, en A Rúa, comenzó a recibir a los primeros grupos de vendimiadores llegados de otros lugares a Valdeorras. En el paraje comprendido entre la playa del embalse de San Martiño, sobre el río Sil, y el refugio ya puede verse una docena de tiendas de campaña. Bajo sus lonas pernoctan las 18 personas que forman el primer grupo llegado a la Denominación de Orixe en busca de un empleo en la vendimia. El dato lo facilitó la alcaldesa ruesa, María González Albert, basándose en los datos que maneja el Concello. Los acampados proceden de Badajoz -donde no es fácil encontrar trabajo, según comentaron- y de la zona de Santiago.
Cuando la campaña vaya avanzando, irán incorporándose más campistas hasta completar los más de 40 que se suelen reunir en este punto todos los años. La cifra es importante si se tiene en cuenta que la vendimia facilita un empleo temporal a no menos de 800 personas en la comarca, según los cálculos del presidente del Consello Regulador, José Vicente Solarat López.
Llegados al Concello de A Rúa, los vendimiadores dejan sus datos en la Casa Consistorial, lo cual les permite utilizar las duchas del polideportivo municipal. "Se lles da permiso para ducharse. Levan moitos anos vindo", explicó la alcaldesa, María González.
Las semanas previas al inicio de la campaña, las bodegas reciben llamadas de puntos muy distintos del territorio nacional. "Chaman moitos. De todos os rincóns", comentó Joaquín Sánchez, propietario de la embotelladora ruesa Alán de Val. Muchos llaman, después de visitar la sede del Consello Regulador, donde les entregan un listado de asociados. José Vicente Solarat, su presidente, comentó que coincidió con tres, dos de ellos de nacionalidad extranjera.
No todos aquellos que buscan trabajo en la vendimia valdeorresa proceden de otras zonas. La mayoría son de la comarca y recurren a este empleo temporal en busca de unos ingresos que antes obtenían en otras empresas. La reducción de plantillas en el sector pizarrero, que bajó de 3.600 a 2.400 durante la crisis, según los datos que maneja la Asociación Galega de Pizarristas, sin duda tiene mucho que ver con los nuevos vendimiadores. "Desde hace tres años viene mucha gente de la zona", confirmó Julio Ricarte, enólogo de la bodega cooperativa ruesa Virgen de las Viñas.
Los vendimiadores no llegan solos. Con ellos aparece la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, dependiente del Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Fuentes del sector aún recuerdan su paso por la Feira do Viño 2014. "O problema é que hai xente que non quere darse de alta", dijeron.
