Los valdeorreses volverán a echar de menos el chocar de las cuncas en verano. No habrá festas das covas (también conocidas como rutas das covas) en ninguna de las localidades que albergaban anualmente estas citas. A pesar del avance de la desescalada, que ya está abriendo la puerta a la posibilidad de organizar verbenas bajo ciertas condiciones, las medidas sanitarias son incompatibles con la celebración de estas fiestas.
Eladio Santos, concelleiro de Promoción Económica, Turismo, Comercio e Consumo de O Barco, comenta que no habrá covas en O Castro. “No se puede. Imposible hacer eso”, dice. “Hace tiempo que se decidió no hacerla, y por parte de los coveiros ya ni se lo plantearon”, afirma antes de comentar la complicación de preparar un evento así en tiempos de coronavirus. “Aunque quieras planificar se te puede venir atrás todo”.
Las rutas das covas son unos de los fenómenos fiesteros del verano comarcal. En ellas se compra una taza a modo de entrada, que luego se llena de vino en cada una de las covas participantes. Las covas son bodegas tradicionales en las que se almacenaba el vino para que se conservase en buen estado.
Fuentes de la Asociación de Coveiros de Vilamartín confirmaron que será otro año de sequía para los gaznates de los más fiesteros. A pesar de que se reunieron para considerar la posibilidad de organizar el evento, plato fuerte del calendario, finalmente decidieron que Vilamartín vivirá otro año en blanco. No solo es muy difícil controlar que la gente cumpla con las medidas de prevención, sino que las propias características de las covas, espacios muy cerrados, presentan un riesgo que desde la organización no están dispuestos a asumir.
En el calendario “ruteiro” valdeorrés también se incluían citas en localidades como Seadur (Larouco), O Val (Rubiá) y Arcos (Vilamartín), aunque en estos sitios la esmorga tampoco se abrirá paso. Los últimos años generaban un interés muy elevado, y era común ver gente que acudía desde todos los sitios de la comarca o incluso desde lugares aún más lejanos.
Otro año más, Valdeorras se quedará sin ellas. El vacío calendario de fiestas y verbenas de la comarca no incluye ningún evento de este tipo. Mientras la situación sanitaria no lo permita las cuncas seguirán acumulando polvo, y el vino, las charangas y los pinchos bajo la noche estival tendrán que esperar.
