La androlla compartió ayer el protagonismo con los boteiros y folións en el 'Domingo Gordo' de Viana do Bolo. El exquisito manjar propio de la localidad hizo las delicias de los cerca de 3.000 comensales que se dieron cita en el polideportivo municipal para disfrutar de la gastronomía típica de estas fechas.
La fiesta, que algunos capitanean ininterrumpidamente desde el 'xoves de comadres', la abrió la banda de gaitas anunciando a los vecinos la llegada de los folións y sus respectivos boteiros. Ataviados con bombos y azadas, una nutrida representación del rural vianés ambientó desde mediodía el desfile carnavalero por las calles de la localidad. Tras el almuerzo, los folións regresaron a las calles hasta la verbena nocturna que se celebró en la Praza Maior.
Insignia de oro
El salón de actos del Concello albergó, a primera hora, el emotivo acto de imposición de la insignia de oro de la androlla al empresario fallecido Santiago García Fernández. Gerente de la industria cárnica Embutidos García Marcos, García lideró desde 1990 la elaboración de una androlla propia y de gran calidad. Al finalizar, los actos se trasladaron hasta la Praza Maior con la lectura del pregón previo al desfile por parte del ex-jugador de baloncesto del Real Madrid, Wayne Brabender.
Insignia de oro
El salón de actos del Concello albergó, a primera hora, el emotivo acto de imposición de la insignia de oro de la androlla al empresario fallecido Santiago García Fernández. Gerente de la industria cárnica Embutidos García Marcos, García lideró desde 1990 la elaboración de una androlla propia y de gran calidad. Al finalizar, los actos se trasladaron hasta la Praza Maior con la lectura del pregón previo al desfile por parte del ex-jugador de baloncesto del Real Madrid, Wayne Brabender.
