El alcalde de Vilamartín, el socialista Enrique Álvarez Barreiro, y los voluntarios de Protección Civil en el municipio están trabajando desde hace unos días en las tareas de desbroce de una antigua senda -'muy utilizada antaño por los vecinos para trasladar en carros los sacos a los molinos situados en los contornos', explicó el regidor- que une esta localidad con la de Robledo, donde tradicionalmente se celebra la fiesta de San Cosme.
La recuperación de este viejo camino 'es el primer paso para poner en marcha una ruta senderista circular', anunció Álvarez Barreiro, que recorrerá los pueblos de Robledo, San Vicente, Ferreira de San Vicente, O Mazo y regreso a Vilamartín.
Se trata de una ruta de entre 20 y 25 kilómetros de recorrido, de una dificultad media, 'ya que incluye pendientes de cierta exigencia en su trazado', apuntó el alcalde vilamartinés, y que se calcula que requerirá para cubrirlos entre cuatro y cinco horas.
MOLINOS Y SECADEROS
A lo largo de esta ruta senderista 'se reparten diversas construcciones relacionadas con viejos oficios y, en concreto, con la elaboración del pan, como un molino, que intentaremos recuperar para acondicionarlo como museo; secaderos o pozas', señaló Enrique Álvarez.
De momento, antes de finales de septiembre estará listo el primer tramo de esta ruta de senderismo, que permitirá a los vecinos de Vilamartín acercarse a la fiesta de San Cosme, en Robledo, 'por el mismo camino que hacían antaño y que todavía conserva, en su suelo enlosado de pizarra, las huellas de los viejos carros', aseguró el regidor vilamartinés.Los trabajos de desbroce están siendo realizados personalmente por el alcalde, concejales y voluntarios, 'con la ayuda de una pequeña excavadora que nos presta un vecino', dijo Álvarez.
Se trata de una ruta de entre 20 y 25 kilómetros de recorrido, de una dificultad media, 'ya que incluye pendientes de cierta exigencia en su trazado', apuntó el alcalde vilamartinés, y que se calcula que requerirá para cubrirlos entre cuatro y cinco horas.
MOLINOS Y SECADEROS
A lo largo de esta ruta senderista 'se reparten diversas construcciones relacionadas con viejos oficios y, en concreto, con la elaboración del pan, como un molino, que intentaremos recuperar para acondicionarlo como museo; secaderos o pozas', señaló Enrique Álvarez.
De momento, antes de finales de septiembre estará listo el primer tramo de esta ruta de senderismo, que permitirá a los vecinos de Vilamartín acercarse a la fiesta de San Cosme, en Robledo, 'por el mismo camino que hacían antaño y que todavía conserva, en su suelo enlosado de pizarra, las huellas de los viejos carros', aseguró el regidor vilamartinés.Los trabajos de desbroce están siendo realizados personalmente por el alcalde, concejales y voluntarios, 'con la ayuda de una pequeña excavadora que nos presta un vecino', dijo Álvarez.
