La necesidad de renovar las tuberías de la red de abastecimiento en aquellas zonas en las que aún son de fibrocemento es una de las obras que considera el equipo de gobierno
El equipo de gobierno socialista de Vilamartín trabaja en la elaboración del presupuesto municipal de 2017. En un principio, los cálculos del alcalde, Enrique Álvarez Barreiro, apuntan a un total similar al del ejercicio anterior, cuantificado en torno a 1,5 millones de euros.
La necesidad de renovar las tuberías de la red de abastecimiento en aquellas zonas en las que aún son de fibrocemento es una de las obras que considera el equipo de gobierno. Las conducciones de aguas residuales también preocupan, especialmente en la zona de A Rodeleira.
Otra obra que el equipo de gobierno considera prioritaria es la construcción de una depuradora en la aldea de Arcos. Los vertidos de este núcleo ya propiciaron una sanción económica de la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil, según recordó el regidor.
Enrique Álvarez, es consciente de que los aproximadamente 200.000 euros que podrán ser destinados a obras no bastan para cubrir todas las necesidades, por lo que inició el diseño de un plan de urgencias.
