La Confederación Hidrográfica Miño-Sil ha abierto una investigación para conocer las causas del incidente
El embalse del Santiago-Sil en el municipio ourensano de Vilamartín de Valdeorras ha sufrido una ruptura esta pasada noche que no ha causado daños personales ni materiales, pero sí preocupación en el ayuntamiento. Así lo indica el regidor municipal, Enrique Álvarez, que apela a la "necesidad de revisar" la estructura de todas las presas del río Sil. La Confederación Hidrográfica Miño-Sil ha abierto una investigación para conocer las causas del incidente.
Sobre las 22,00 horas de este martes la empresa gestora del embalse Santiago-Sil, Iberdrola, avisó a través del 112 Galicia de la ruptura de una compuerta con el consecuente aumento del caudal del río Sil aguas abajo, en los ayuntamientos de Petín y A Rúa.
Los técnicos de la Dirección Xeral de Emerxencias e Interior contactaron directamente con los alcaldes y alcaldesas de los municipios para activar las necesarias medidas de control y prevención.
El personal de la empresa también realizó la correspondiente inspección y comprobó "el buen estado de los núcleos de población" situados en el área de influencia indicando que "seguirán vigilantes ante cualquier anomalía".
Con todo, el regidor municipal de Vilamartín de Valdeorras, Enrique Álvarez, ha puesto el foco en "la necesidad de una revisión", porque "estas instalaciones van teniendo unos años y es necesario tomar medidas de precaución".
Así ha explicado que el incidente no ha supuesto más que un susto al producirse durante la noche cuando ya no hay pescadores en esa zona "porque de ser de otro modo igual habría sido distinto".
"Preocupa que vuelva a repetir"
"No nos preocupa lo que pasó, nos preocupa que se vuelva a repetir", señala el alcalde que apunta que el mantenimiento de la presa "es constante" y que desde la empresa concesionaria, Iberdrola, trasladaron que el incidente se debió al fallo de la compuerta.
Un fallo por el que el regidor espera los informes técnicos porque manifiesta su inquietud sobre el hecho de que "reventase sin más, con el embalse en su nivel normal, sin que hubiese un aumento de la presión". Es por ello que considera necesario que "se revisen todas las presas del río Sil", porque advierte que el incidente "en una de mayor tamaño podría haber sido un peligro".
Además el alcalde lamenta que no le consta ningún protocolo sobre "qué medidas asumir en caso de reventón". Así, ha indicado que "es necesario tener algo para poder avisar a la población, una especie de megafonía para cualquier tipo de emergencias", porque explica que si revienta otra presa río arriba "no se van a escuchar las sirenas" y se pregunta cómo se avisaría a los vecinos.
Con todo, el mensaje es de tranquilidad, Iberdrola ha colocado un cierre provisional mientras se prepara el repuesto definitivo y, además, el propio regidor municipal indica que Santiago-Sil es una "presa relativamente pequeña por lo que el cauce del propio río ha sido capaz de asumir el agua".
El regidor de A Rúa, Álvaro Fernández, cuenta que la compuerta "salió despedida" más de 2 kilómetros río abajo, "llegando casi a la cola del embalse" y provocando un estruendo que "asustó a los vecinos" pero sin ninguna otra incidencia.
"El siguiente embalse, el de San Martiño, ha recogido sin daños el volumen", subraya Fernández para quien no existe motivo de inquietud, porque "estas presas tienen unos controles muy rigurosos y muy regulares" y además incide en que la presa de Valencia del Sil "es un salto muy pequeño", de hecho explica que "el cauce no llegó a desbordar en ningún momento".
